Qui¨¦n sabe qu¨¦ y se lo calla

Buena la ha hecho el amigo y colega Miguel ?ngel Aguilar cuando escribi¨® en estas p¨¢ginas (el martes) que "en Valencia cada d¨ªa crece m¨¢s la distancia entre lo que se sabe y lo que se publica. Y cuando esto sucede, una de dos, o el poder aludido en las noticias sotto voce o los medios enmudecidos incapaces de publicar lo verificado est¨¢n enfermos". De no tratarse de tan egregio profesional lo reputar¨ªamos de humorada o de recurso ret¨®rico, pero no es ¨¦se el caso. Se trata de alguien que con acreditada experiencia y rigor se?ala con el dedo a los oficiantes ind¨ªgenas de la noticia y del comentario. Y debo a?adir que nos ha sumido en la perplejidad y en la sospecha: ?qui¨¦n sabe qu¨¦ y se lo calla?, nos cuestionamos. Porque la verdad es que por estos pagos, desde la ley de Fraga de 1966, y no digamos desde comienzos de los 80, no s¨®lo se ha divulgado todo lo que se sabe sino lo que se intuye o es mero rumor, con grave menoscabo de la deontolog¨ªa period¨ªstica. Bueno ser¨ªa que el admirado compa?ero Aguilar nos diera unas pistas de los ocultamientos que se observan o que su fina sensibilidad percibe. Nos tiene sobre ascuas.