El 'negro de Banyoles' se encuentra ya en Madrid

La operaci¨®n, urdida por el Ayuntamiento de Banyoles y el Ministerio de Asuntos Exteriores, pas¨® totalmente inadvertida y no fue hasta ayer por la tarde cuando el alcalde, Pere Bosch, anunci¨® en rueda de prensa que el bosquimano ya no estaba en Banyoles.Bosch justific¨® el sigilo del traslado por su af¨¢n de apaciguar la pol¨¦mica y lleg¨® incluso a pedir disculpas a los periodistas, a la vez que reconoc¨ªa que algunos vecinos de Banyoles no aprobar¨ªan la decisi¨®n del consistorio.

La salida del bosquimano del museo, despu¨¦s de dos horas de preparaci¨®n y apuntalamiento del embalaje, s¨®lo tuvo como testigos al propio alcalde, a la conservadora del Museo Darder, a una representante del museo madrile?o que lo custodiar¨¢ estos d¨ªas y a los cinco empleados de la empresa de transporte. El alcalde neg¨® que el desenlace de la larga pol¨¦mica demuestre que lo ¨²nico que quer¨ªa el Ayuntamiento era "quitarse el negro de encima". Bosch admiti¨® que no enviar¨¢ ning¨²n representante municipal a la ceremonia que se llevar¨¢ a cabo en la capital de Botsuana. "Ahora todo est¨¢ en manos del Ministerio de Asuntos Exteriores", reconoci¨® el alcalde.

Si bien el viaje hasta Madrid lo realiz¨® el bosquimano como una pieza de museo y no recibi¨® el trato que se reserva a un cad¨¢ver, para volar hacia ?frica ser¨¢ introducido en un f¨¦retro, ya que ser¨ªa inconcebible para las autoridades africanas que llegara metido en una caja repleta de virutas.

Entrega en el aeropuerto

Seg¨²n avanz¨® ayer el embajador de Espa?a en Namibia, Eduardo Garrigues-L¨®pez Chicheri, que tambi¨¦n est¨¢ acreditado en Botsuana y act¨²a como mediador entre el Gobierno espa?ol y las autoridades del pa¨ªs africano, la ceremonia de entrega oficial del cad¨¢ver del bosquimano se realizar¨¢ en el mismo aeropuerto de Gaborone el d¨ªa 4 de octubre.

Con toda probabilidad el embajador espa?ol ser¨¢ la m¨¢xima autoridad presente en el acto. Para el d¨ªa siguiente se reserva una ceremonia de desagravio en la que estar¨¢ presente un ministro del Gobierno de Botsuana y representantes de las diversas religiones y etnias (Ver EL PA?S del 5 de octubre). Los restos del bosquimano ser¨¢n enterrados en la misma capital y actualmente se est¨¢ trabajando en una l¨¢pida que deje constancia del acto.

El guerrero bosquimano, que ha dejado en Banyoles su t¨ªpica lanza, su taparrabos y las plumas de pavo real que adornaban su espalda, permanecer¨¢ hasta el 3 de octubre en el Museo Nacional de Antropolog¨ªa de Madrid. A las 23.35 horas partir¨¢ en un vuelo de Iberia hacia Johanesburgo, en Sur¨¢frica, donde deber¨¢ embarcarse en otro vuelo, de poco m¨¢s de una hora, que lo trasladar¨¢ hasta Gaborone. El Gobierno de Botsuana ha nombrado una comisi¨®n para preparar la ceremonia, que seg¨²n Garrigues-L¨®pez ser¨¢ "digna pero sin pompa". El embajador espa?ol se mostr¨® convencido de que en este acto se guardar¨¢ el debido respeto hacia el pa¨ªs y la ciudad que exhibi¨® al guerrero durante a?os.

Por el momento, el Ayuntamiento de Banyoles ha quedado tan escarmentado con la pol¨¦mica surgida a causa de la exhibici¨®n p¨²blica del guerrero que ni se plantea hacer una r¨¦plica del hombre disecado utilizando el molde que varios escultores locales sacaron del bosquimano.

Bosch se mostr¨® rotundo al afirmar que toda la controversia derivada del caso ha afectado muy negativamente la imagen de Banyoles y que, por ahora, s¨®lo espera que se vaya diluyendo. El alcalde espera incluir en la futura remodelaci¨®n del museo un apartado dedicado al caso del guerrero disecado.