Jaime Bayly mezcla "la culpa y el cinismo" en su ¨²ltima novela

Con un fuerte componente autobiogr¨¢fico, que no esconde en absoluto, el novelista peruano Jaime Bayly (Lima, 1965) ha escrito, dice, "una novela muy culposa". Los amigos que perd¨ª (Anagrama) consta de cinco cartas dirigidas por un escritor de ¨¦xito a otros tantos antiguos compa?eros que le han retirado la palabra. ?ste les utiliz¨® para escribir sus primeras novelas y ahora les pide perd¨®n, aunque con "una mezcla de culpa y cinismo".

Jaime Bayly, que ayer present¨® la novela en Madrid acompa?ado del presentador de televisi¨®n Boris Izaguirre y el escritor Marcos Giralt Torrente, rinde un contradictorio homenaje a sus antiguos amigos Melanie, Sebasti¨¢n, Daniel, Manuel y el doctor Guerra, personajes ficticios basados en personas reales a las que el escritor dice haber "alejado torpemente" de su vida. "Si bien el narrador dice que nunca quiso hacerles da?o, cuenta en las cartas unas intimidades que probablemente volver¨¢n a enfadar a esas personas que le marcaron de manera profunda", explica, aunque a?ade que en esas letras hay tambi¨¦n mucho de ficci¨®n. En Los amigos que perd¨ª, contin¨²a, "hay una mezcla de culpa y arrepentimiento, sin el peso de los cuales no la hubiera escrito, y de terquedad y cinismo". Terquedad porque el narrador "sigue siendo fiel a su naturaleza de escritor". Cinismo porque "en la novela persiste una mirada un tanto descre¨ªda y sarc¨¢stica, sin la cual no contar¨ªa tantas cosas". Aun as¨ª, agrega, uno de estos amigos le ha llamado para comunicarle que le hab¨ªa gustado la carta: "Es un modesto consuelo para alguien que escribe para vengarse del pasado y escapar de la infelicidad".

Pero ?por qu¨¦ utiliz¨® el narrador las figuras de sus amigos para escribir sus primeras novelas? "?l considera que es l¨ªcito usar la experiencia propia para novelar y fabricar una mentira persuasiva", responde Bayly. "Pero reconoce que fue muy torpe, por ineptitud, impaciencia y falta de oficio. Dej¨® unas huellas que permit¨ªan ligar los personajes ficticios con los reales. No supo esconderlos mejor, los exhibi¨® innecesariamente y los expuso a habladur¨ªas", resume. ?Y por qu¨¦ Bayly tiene esa tendencia al exhibicionismo en sus libros? El escritor responde en tono jocoso: "Por mi falta de oficio, por mi precaria imaginaci¨®n y mi esp¨ªritu morboso". Ya m¨¢s en serio, asegura: "Me he propuesto que mi pr¨®xima novela sea m¨¢s ficticia". Y es que Los amigos que perd¨ª desprende un aroma de fin de etapa. "En el libro hay personajes que reaparecen, pero est¨¢n vistos con m¨¢s serenidad que en las primeras novelas, que eran m¨¢s violentas. Con ¨¦sta podr¨ªa cerrar una etapa fuertemente autobiogr¨¢fica, aunque siempre habr¨¢ lectores suspicaces que no se lo crean", dice el autor de Los ¨²ltimos d¨ªas de 'La Prensa', No se lo digas a nadie, La noche es virgen, con la que obtuvo el Premio Herralde de Novela en 1997, y Yo amo a mi mami.Bayly, que est¨¢ instalado en Miami, donde presenta un programa semanal de entrevistas -"no tengo vocaci¨®n para la pobreza"-, se fue de Per¨² hace ocho a?os, coincidiendo con la fecha en que el presidente Alberto Fujimori disolvi¨® el Congreso con apoyo militar. "No quer¨ªa vivir bajo una dictadura", dice ahora. Este fin de semana, asegura, ha celebrado la dimisi¨®n de Fujimori, aunque advierte que con cierto "escepticismo": "Son capaces de volver a ama?ar las elecciones".