Putin promete a Gorbachov que defender¨¢ la libertad de prensa
El esc¨¢ndalo que tiene como centro la disputa de la propiedad de Media Most, el mayor grupo privado de comunicaci¨®n de Rusia, reuni¨® ayer en el Kremlin a Mija¨ªl Gorbachov y a Vlad¨ªmir Putin. El presidente de Rusia asegur¨® a quien lo fue de la URSS que defender¨¢ la libertad de prensa, porque, sin ella (la cita es de Gorbachov), "la sociedad no puede funcionar normalmente ni resolver sus problemas". A¨²n es m¨¢s: Putin asegur¨® al impulsor de la glasnost (transparencia informativa), antecedente sovi¨¦tico de la libertad de informaci¨®n, que no intervendr¨¢ en el conflicto entre el monopolio del gas Gazprom y Vlad¨ªmir Gusinski (patr¨®n de Most), que la disputa debe ser resuelta por los tribunales y que el canal de televisi¨®n NTV (joya de la corona del grupo medi¨¢tico) debe seguir siendo independiente y no gubernamental.
Como ya hab¨ªa hecho el primer ministro, Mija¨ªl Kasi¨¢nov, Putin consider¨® que el ministro de Informaci¨®n, Mija¨ªl Lesin, se comport¨® de forma "inaceptable" cuando uni¨® su firma a la de los jefes de Most y la divisi¨®n medi¨¢tica de Gazprom en el documento por el que Gusinski se compromet¨ªa a vender su imperio a la primera empresa de Rusia por 300 millones de d¨®lares (unos 57.000 millones de pesetas) y el perd¨®n de otros 473 millones en deudas.
El texto incorporaba un anexo en el que se afirmaba que se levantar¨ªa la acusaci¨®n de estafa contra Gusinski y la prohibici¨®n de que abandonase el pa¨ªs. El magnate se neg¨® a cumplir luego el trato alegando que fue obtenido pr¨¢cticamente "a punta de pistola". Gorbachov, que dirige un organismo de supervisi¨®n creado por la NTV, habl¨® por su parte de "crudo chantaje estatal" y de intento del Kremlin de controlar la cadena a trav¨¦s de Gazprom.
El ministro Lesin est¨¢ en la cuerda floja, y s¨®lo la resistencia de Putin a actuar bajo presi¨®n parece explicar que a¨²n no haya ca¨ªdo. Hay coincidencia generalizada sobre quien le sustituir¨¢: Vladislav Sherstiuk, vicesecretario del Consejo de Seguridad. Una perspectiva que hace temer que el relevo no implique m¨¢s aire fresco, sino todo lo contrario. Sherstiuk es uno de los redactores de la nueva doctrina de la seguridad informativa, que, cosa ins¨®lita en una te¨®rica democracia, pretende proteger al Estado de los periodistas.
Lesin ha prestado buenos servicios al Kremlin. Fue una figura clave de la campa?a del partido del poder en las legislativas y de la de Putin en las presidenciales, y contribuy¨® al acoso y derribo del alcalde de Mosc¨², Yuri Luzhkov. El pasado s¨¢bado, el ministro, de car¨¢cter abierto y campechano, invit¨® a periodistas rusos y extranjeros a una barbacoa en un club de los alrededores de Mosc¨², e incluso se embuti¨® un gorro de cocinero para asar la carne. A mitad del festejo se fue a recibir la bronca de Kasi¨¢nov por su pol¨¦mica firma en el acuerdo Most-Gazprom. Cuando se le pregunt¨® a su vuelta si iba a dimitir, contest¨®: "Sin comentarios".
Deuda con Gazprom
Tambi¨¦n la actitud de Gusinski suscita muchas cr¨ªticas, incluso entre quienes temen por el futuro de la libertad de prensa en Rusia. Y es que, aunque est¨¦ en juego la supervivencia de una voz ahora cr¨ªtica con el poder, lo cierto es que Most tiene una deuda con Gazprom, que no la paga, y que, en una econom¨ªa de mercado, eso suele acarrear desagradables e inevitables consecuencias. "Gusinski no puede tenerlo todo", asegura un editorial del diario The Moscow Times. Por su parte, Alex¨¦i Pankin, editor del mensual Sreda, especializado en temas de comunicaci¨®n, recuerda la "relaci¨®n incestuosa" de la NTV con el Estado, que arranca de 1996, cuando Gusinski y otros oligarcas pusieron toda la carne (y el dinero) en el asador para lograr la reelecci¨®n de Bor¨ªs Yeltsin.
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