El rector defiende el reglamento del catal¨¢n de la URV, que fue impugnado

El rector de la Universidad Rovira i Virgili (URV), Llu¨ªs Arola, defendi¨® ayer a ultranza, en su discurso de inauguraci¨®n oficial del curso 2000-2001, el reglamento de usos ling¨¹¨ªsticos que, aprobado por la mayor¨ªa del claustro el pasado a?o, result¨® impugnado en los tribunales de Tarragona, que decretaron la necesidad de cambiar determinados art¨ªculos. Arola, que record¨® que ¨²nicamente se requiere "corregir su redacci¨®n", arremeti¨® duramente en la fase final de su alocuci¨®n contra los profesores que motivaron su impugnaci¨®n, y reclam¨® a la Generalitat mayores recursos econ¨®micos."Unos pocos profesores y profesoras, que act¨²an como enfervorizados defensores del biling¨¹ismo estricto, un eufemismo que ahora se utiliza para no hablar del monoling¨¹ismo". As¨ª defini¨® ayer Arola al grupo de profesores de la Universidad de Tarragona que decidieron dirigirse a la organizaci¨®n Profesores para la Democracia y a Convivencia C¨ªvica Catalana (CCC), liderada por el conservador Aleix Vidal-Quadras, para impugnar el reglamento de usos ling¨¹¨ªsticos de la URV, aprobado por la mayor¨ªa del claustro en enero de 1999 y que consideraban inconstitucional por discriminar el castellano.

Arola record¨® que los tribunales, en primera instancia, hab¨ªan valorado como ajustada a derecho las normas de uso del catal¨¢n, as¨ª como la potestad del claustro para regular la vida en el campus, lo que a su juicio "representa una victoria contundente de la legalidad, un refuerzo a la autonom¨ªa universitaria y un paso adelante para alcanzar la normalidad ling¨¹¨ªstica plena". El rector reconoci¨® que la pol¨¦mica ha afectado a "la buena imagen de nuestra instituci¨®n, cosa complicada en momentos de competitividad acentuada". El rector obvi¨® referirse al segundo conflicto judicial al que se enfrenta, el de la denuncia por prevaricaci¨®n presentada en su contra por una profesora que fue apartada de la correcci¨®n de las pruebas de selectividad tras acudir al Defensor del Pueblo para revelar una supuesta discriminaci¨®n del castellano en las mismas. "No es el momento de hablar".