La ciudad multicultural
La consejera de Cultura, Mari Carmen Garmendia, tuvo que recurrir ayer a rudimentos de catal¨¢n y de franc¨¦s, adem¨¢s de servirse del castellano y el euskera para comunicar al medio millar de j¨®venes procedentes de varias regiones de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos que se iniciaba la competici¨®n que les har¨ªa recorrer Vitoria. Se trataba de muchachos de entre 14 y 18 a?os de ambos lados de la frontera, ataviados con llamativos petos, mochilas y gorras, que despu¨¦s de haber pasado la tarde y noche del viernes en la isla alavesa de Zuaza se dispon¨ªan a acometer su ¨²ltima jornada de participaci¨®n en las denominadas Aventuras Urbanas 2000 con un juego de pistas por la capital alavesa."Se trata de buscar una comunicaci¨®n entre los j¨®venes de distintas culturas, un mestizaje", indicaba Jos¨¦ Luis Madrazo, director de Juventud del Gobierno vasco. Es un programa dirigido a promover la interculturalidad, incluido dentro de las acciones comunitarias de la Europa de las Regiones y asumido por la comunidad de los Pirineos y el Gobierno vasco, que lo ha organizado en colaboraci¨®n con la Diputaci¨®n alavesa y el Ayuntamiento de Vitoria.
Estas actividades se desarrollan por primera vez con la presencia de muchachos de todas las regiones pirenaicas despu¨¦s de una experiencia piloto celebrada anteriormente en Bilbao. Tras la primera fase de las pruebas desarrollada el pasado fin de semana en Burdeos, anteayer llegaron a Zuaza para asistir a la denominada Mito jaia donde, con un envoltorio centrado en la mitolog¨ªa vasca, deb¨ªan realizar pruebas deportivas y de habilidad en las orillas del pantano de Ullibarri. Nicola, un joven aquitano de raza negra, escrutaba ayer por la ma?ana en el parque de la Florida junto a sus compa?eros de grupo un plano de Vitoria para encontrar el siguiente destino de la competici¨®n. "Lo m¨¢s interesante es conocer gente de otro sitio y lugares nuevos", indicaba mientras intentaba ubicarse. Los equipos de cuatro miembros junto a un monitor tuvieron que recorrer museos, centros c¨ªvicos e instalaciones deportivas donde ten¨ªan que responder a cuestionarios culturales o desarrollar actividades f¨ªsicas.
Pedro, hijo de emigrantes espa?oles y residente en Bayona, destacaba "el respeto" que se hab¨ªa encontrado entre los participantes, muy alejado de la situaci¨®n que se vive en la zona marginal en la que trabaja habitualmente como monitor. Junto a ¨¦l, un grupo de chicos vitorianos se quejaba de la "competitividad" de los franceses, que en muchos casos limitaban la relaci¨®n personal con el resto.
A lo largo de toda la ma?ana y parte de la tarde se fueron desarrollando las pruebas con una docena de puestos de control en la ciudad. "Creo que la integraci¨®n si se est¨¢ consiguiendo", indicaba Gotzon, miembro de la organizaci¨®n del evento por parte del Gobierno vasco. "Los chavales llegan a hablar en ingl¨¦s si no se entienden de otra forma y se ha visto un buen ambiente".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.