El vicepresidente argentino renuncia al cargo tras enfrentarse a De la R¨²a
El vicepresidente argentino, Carlos Chacho ?lvarez, se dispon¨ªa anoche a anunciar formalmente su renuncia al cargo. El l¨ªder del Frente para un Pa¨ªs Solidario (Frepaso) permanec¨ªa recluido en su casa discutiendo con los principales dirigentes de su partido los t¨¦rminos del texto de su renuncia. La disputa pol¨ªtica del vicepresidente con el presidente Fernando De la R¨²a, l¨ªder de la Uni¨®n C¨ªvica Radical, estall¨® el pasado jueves, cuando el jefe del Estado renov¨® su Gabinete ministerial sin atender a las sugerencias de ?lvarez.
El Gobierno argentino confirm¨® anoche oficialmente que ?lvarez hab¨ªa presentado su "renuncia indeclinable". Poco antes, un portavoz del vicepresidente confirmaba a EL PA?S la dimisi¨®n. "Se va, se va ¨¦l, pero no el Frepaso de la Alianza", explico la misma fuente de la coalici¨®n Frepaso, formada por peronistas disidentes, socialistas y dem¨®cratas cristianos, y que integra la Alianza en el poder junto con los radicales. Graciela Fern¨¢ndez Meijide, ministra de Desarrollo Social y cofundadora del Frepaso, dijo que ella segu¨ªa siendo "leal al presidente" y que permanecer¨ªa en su cargo. Otro de los dirigentes de la primera l¨ªnea del Frepaso, el jefe de gobierno de Buenos Aires, An¨ªbal Ibarra, coincidi¨® con ?lvarez en las cr¨ªticas a las decisiones de De la R¨²a: "No conforman a nadie y no fortalecen a la Alianza". Ibarra lleg¨® por la tarde a casa de ?lvarez para incorporarse a la reuni¨®n con los dem¨¢s colaboradores del vicepresidente. Los diputados del Frepaso apoyaron tambi¨¦n al vicepresidente y dijeron que se estaba atravesando una "situaci¨®n penosa" porque la Alianza est¨¢ defraudando la esperanza que toda la sociedad ten¨ªa puesta en ella. ?lvarez ten¨ªa previsto explicar anoche (a primera hora de la madrugada de hoy en Espa?a) los motivos de su renuncia, pero se propon¨ªa a la vez "ratificar la necesidad de trabajar para consolidar la Alianza como proyecto pol¨ªtico".
Cuando las emisoras de radio y televisi¨®n comenzaron a difundir hacia el mediod¨ªa de ayer la noticia de la renuncia del vicepresidente, unas 500 personas, entre vecinos y militantes del Frepaso, se acercaron a la puerta del edificio donde vive para pedirle que no se marchara. Con carteles improvisados en el momento y dando voces, coreaban: "Chacho no se va".
A las ocho de la ma?ana de ayer, ?lvarez le comunic¨® su decisi¨®n por tel¨¦fono al jefe del Partido Radical y ex presidente Ra¨²l Alfons¨ªn, su principal aliado en la Alianza, quien le pidi¨® tiempo para "intentar una gesti¨®n" de ¨²ltima hora con el jefe del Estado. Seg¨²n uno de sus colaboradores, ?lvarez le dijo entonces que le agradec¨ªa su inter¨¦s, pero que era in¨²til. Y agreg¨® : "La decisi¨®n est¨¢ tomada". Cuatro horas despu¨¦s transmit¨ªa su decisi¨®n a De la R¨²a.
La primera se?al de que la ruptura era definitiva entre el presidente y el vicepresidente de la naci¨®n se pudo apreciar a simple vista en el acto de juramento de los nuevos ministros, entre ellos tambi¨¦n el de Alberto Flamarique, el ex ministro de Trabajo ascendido ahora a secretario general de la Presidencia. ?lvarez hab¨ªa dicho hace dos semanas que la figura del ministro de Trabajo estaba "desgastada" despu¨¦s del esc¨¢ndalo por los supuestos sobornos pagados a senadores de la oposici¨®n para que aprobaran las reformas a las leyes laborales. Flamarique, un militante juvenil de la Guardia de Hierro, organizaci¨®n de la derecha peronista, desemboc¨® al fin como el propio ?lvarez y otros militantes disidentes del llamado menemismo peronista en la creaci¨®n del Frente Grande, movimiento que dio origen luego al Frepaso.
Cuando la Alianza asumi¨® el poder el pasado mes de diciembre, Flamarique lleg¨® al Ministerio de Trabajo en nombre del Frepaso y de la mano de ?lvarez, junto con la ministra de Desarrollo Social, Graciela Fern¨¢ndez Meijide. La denuncias de las supuestas coimas (sobornos) que el Gobierno habr¨ªa pagado a los senadores de la oposici¨®n hizo estallar hace dos meses una crisis que alcanz¨® ayer su m¨¢ximo pico de tensi¨®n.
?lvarez, como presidente del Senado, decidi¨® que era la oportunidad de cumplir al fin con la promesa de "limpiar" la forma de hacer pol¨ªtica. El vicepresidente reclam¨® la renuncia de los senadores sospechosos y del presidente provisional de la C¨¢mara, el senador radical Jos¨¦ Genoud. En el camino embisti¨® tambi¨¦n contra el ministro de Trabajo y el secretario de Inteligencia del Estado, Fernando de Santib¨¢?ez, un amigo personal de De la R¨²a. El vicepresidente no ten¨ªa dudas de que "hubo sobornos, alguien los pag¨® y la plata sali¨® del Gobierno".
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