La oposici¨®n peruana se moviliza en la calle tras la ruptura con Fujimori

ma La sensaci¨®n de que no se ha avanzado nada para abrir paso a la democracia ha impulsado a la mayor¨ªa de partidos de la oposici¨®n peruana a convocar una manifestaci¨®n el pr¨®ximo martes para exigir la renuncia del presidente Alberto Fujimori. La oposici¨®n est¨¢ convencida de que Fujimori y su Gobierno no est¨¢n dispuestos a desarticular la estructura de poder armada por el jefe de los servicios secretos peruanos, Vladimiro Montesinos, condici¨®n m¨ªnima para unas elecciones transparentes y justas.

El primer mitin ser¨¢ el martes por la noche (hora local) en la plaza San Mart¨ªn, en el que participar¨¢n l¨ªderes de siete fuerzas pol¨ªticas opositoras. Seg¨²n el principal dirigente de la oposici¨®n, Alejandro Toledo, ¨¦ste ser¨¢ el inicio de las movilizaciones en todo el pa¨ªs: "Los peruanos nos volveremos a poner de pie para rescatar la dignidad del pa¨ªs y para recuperar la democracia, la libertad, la honestidad perdidas durante el r¨¦gimen fujimorista".La oposici¨®n espera que la manifestaci¨®n sea multitudinaria y contundente para rechazar los intentos del Gobierno de las ¨²ltimas semanas de retrasar el proceso de transici¨®n. "Tenemos un Per¨² molesto porque no se respetan los esfuerzos de los partidos de oposici¨®n ni de la sociedad civil que estamos trabajando para tener elecciones limpias que satisfagan a todos. El Gobierno nos ha puesto en una mecedora", sentenci¨® Toledo.

Ha pasado un mes desde que Fujimori, forzado por la difusi¨®n de un v¨ªdeo en el que Montesinos sobornaba a un congresista de la oposici¨®n, anunci¨® el recorte de su mandato y la convocatoria a nuevas elecciones. Pero nada ha cambiado.

Si bien Montesinos est¨¢ en Panam¨¢, donde est¨¢ pendiente de una solicitud asilo, existen indicios de que mantiene influencia sobre el Gobierno. Hace unos d¨ªas, por ejemplo, el propio Fujimori confes¨® sin ning¨²n rubor que continuaba en contacto con su oscuro asesor, pues le preocupaba la seguridad de Montesinos.

El analista Carlos Tapia sostiene que el consejero presidencial sigue moviendo los hilos en el Congreso. "Si en un principio Montesinos dictaba ¨®rdenes por el beeper, ahora lo hace a trav¨¦s del celular", comenta. De otro lado, la c¨²pula militar (muy cercana al asesor) sigue firme en su puesto y, por incre¨ªble que parezca, han sido relevados de sus cargos dos de los pocos generales contrarios a Montesinos y de conocida trayectoria democr¨¢tica.

La mayor¨ªa del Congreso, por su parte, tambi¨¦n le ha dado la espalda al proceso de transici¨®n que los peruanos reclaman. El viernes, la comisi¨®n que investigaba al congresista del v¨ªdeo, Alberto Kouri, por haber recibido 15.000 d¨®lares (casi tres millones de pesetas) de manos de Montesinos, decidi¨® exonerarle de toda culpa. Horas despu¨¦s, la mayor¨ªa oficialista aprob¨® una ley que termin¨® con la paciencia del ex canciller guatemalteco Eduardo Latorre, encargado de la mesa de di¨¢logo (entre Gobierno, oposici¨®n y organizaciones sociales), patrocinada por la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA), para la democratizaci¨®n del pa¨ªs. Contraviniendo los acuerdos, la ley ampl¨ªa los plazos de la actual legislatura, que debi¨® terminar ayer. Ello motiv¨® que Latorre anunciara, el viernes ¨²ltimo, la suspensi¨®n de las conversaciones. Los representantes de siete partidos opositores liderados por Alejandro Toledo, de Pa¨ªs Posible, plantearon la necesidad de que la OEA nombre un verdadero promotor de soluciones y no s¨®lo un facilitador, como es Latorre.

As¨ª las cosas, con un Fujimori debilitado y evidentemente presionado por la c¨²pula militar y por su controvertido asesor, y con la sensaci¨®n de falta de reglas claras, el escenario de lucha se ha trasladado a las calles. La marcha del martes pretende demostrar qui¨¦n tiene la fuerza pol¨ªtica en el pa¨ªs.