Bigas Luna rueda la sensualidad del Mediterr¨¢neo en 'Son de mar'
"Un poquito de ajo y de aceite de oliva". Bigas Luna dice que su nueva pel¨ªcula mezcla aspectos de muchos de sus otros filmes. Son de mar, basada en la novela hom¨®nima de Manuel Vicent, es una historia mediterr¨¢nea y pasional que indaga en el amor de una mujer por dos hombres. El director catal¨¢n la rueda en Denia (Alicante), junto a Jordi Moll¨¤, Leonor Watling y Eduard Fern¨¢ndez."Hoy he descubierto c¨®mo se comen aqu¨ª las naranjas", explica Bigas Luna, sonriente; "les hacen un agujero y las chupan". Leonor Watling (La hora de los valientes) lo estuvo practicando el pasado lunes mientras rodaba una escena en una nave industrial de Denia. All¨ª, el equipo hab¨ªa recreado la taberna del Tibur¨®n, donde empieza la historia de amor de los protagonistas, y se proteg¨ªa de la gota fr¨ªa. "Estos d¨ªas hemos tenido un tiempo estupendo, pero, como hoy llueve, no podemos trabajar en exteriores, con el mar y la Lonja de Denia", cuenta Bigas Luna.
Vestido de blanco y negro, tranquilo, pero con bastantes kilos de menos, el director catal¨¢n, de 54 a?os, confiesa estar apasionado con el proyecto, "una historia sobre mi mar y mi gente". La pel¨ªcula entronca con lo que ¨¦l llama su trilog¨ªa ib¨¦rica (Jam¨®n, jam¨®n, Huevos de oro y La teta y la luna), donde "la sensualidad de la vida predomina sobre el intelecto". Por eso eligi¨® el paisaje de Denia (Alicante), donde el equipo lleva rodando tres semanas.
Casada con otro
Son de mar est¨¢ basada en un ¨¦xito de ventas del escritor Manuel Vicent que super¨® los 100.000 ejemplares y obtuvo un Premio Alfaguara. Cuenta la historia de un n¨¢ufrago, Ulises, que regresa 10 a?os despu¨¦s de su desaparici¨®n y se encuentra a su esposa casada con otro hombre.Re¨²ne muchas de las obsesiones que Bigas Luna suele reflejar en sus pel¨ªculas, como el sexo, la comida o la muerte. "Es muy pr¨®xima a mi mundo, con personajes que conozco", afirma Bigas Luna; "adem¨¢s, cada vez tengo m¨¢s ganas de contar historias mediterr¨¢neas". La pel¨ªcula naci¨® de una propuesta del productor Andr¨¦s Vicente G¨®mez (con 550 millones de pesetas de presupuesto) y se ha convertido en la adaptaci¨®n m¨¢s personal del cineasta, que ha contado con la colaboraci¨®n estrecha del escritor. "Siempre digo que no quiero conocer al autor de la novela, igual que cuando conozco a una chica no quiero conocer a su padre, por mucho que ¨¦l la haya engendrado", explica, "pero con Vicent me ocurri¨® lo contrario". El director explica que ambos tuvieron "un encuentro de amor" hace muchos a?os. Despu¨¦s, a base de paellas y conversaciones en la playa, Vicent se ha implicado en el proyecto y de vez en cuando se pasa por el lugar de rodaje para ver a su "mejor lector". Bigas Luna tambi¨¦n ha participado en el gui¨®n de la pel¨ªcula, que lleva la firma del hist¨®rico Rafael Azcona, y "es bastante m¨¢s realista que la novela", confiesa.
En un hotel pr¨®ximo a Denia, los actores que encabezan el reparto apenas tienen tiempo de relacionarse con el mundo exterior para hacer un descanso. Leonor Watling es Martina, una chica de un pueblo costero que se enamora de un profesor de instituto. "Es irracional, se deja llevar por los sentimientos y acaba amando a la vez a dos hombres totalmente opuestos, uno intelectual y otro terrenal", explica la actriz, con su melena largu¨ªsima y su aspecto delicado. Es la primera vez que trabaja con Bigas Luna y el reto le daba un poco de miedo, "pero la tranquilidad que tiene me dio confianza".
Para el papel del n¨¢ufrago, el director volvi¨® a llamar a Jordi Moll¨¤, al que descubri¨® en Jam¨®n, jam¨®n y cuya relaci¨®n consolid¨® en Volav¨¦runt. "Es el m¨¢s camale¨®nico que conozco", explica; "nosotros ironizamos sobre nuestra buena relaci¨®n, compar¨¢ndola con la que Fellini ten¨ªa con Mastroianni". Estos d¨ªas, Moll¨¤ vuelve a lucir las gre?as grasientas de la Buena estrella y una mirada azul que se pierde mientras habla pausadamente. "Ulises es un personaje que se siente solo e intenta escapar viajando por el mundo. Es un n¨¢ufrago del mar, pero tambi¨¦n hay muchos n¨¢ufragos en tierra, como esos jefazos que no saben qui¨¦nes son ni d¨®nde est¨¢n", afirma. Su rival es Sierra, un constructor al estilo de Gil y Gil, interpretado por Eduard Fern¨¢ndez, al que Bigas vio en Los lobos de Washington. "Un t¨ªo pragm¨¢tico, de tierra, pero muy enamorado de Martina, con la que se casa", explica el actor. Ambos representan los polos opuestos de un tri¨¢ngulo amoroso alrededor de la chica con el que Bigas Luna quiere hacer una pel¨ªcula "que transmita sensaciones" y sensualidad; esta vez, a trav¨¦s de las sabrosas patatas fritas de la protagonista.
Babelia
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