Fuster, Lluch y un servidor
Mi buen amigo y compa?ero de p¨¢gina, Ernest Lluch, publicaba el domingo pasado un art¨ªculo en el que, coincidiendo con las opiniones del profesor Antoni Furi¨® y del rector Ruiz Torres, apunta la necesidad de hacer aproximaciones cr¨ªticas a Nosaltres els valencians de Fuster. Comparto esa necesidad y suscribo la idea. Y en esa l¨ªnea de revisi¨®n y aproximaci¨®n cr¨ªtica, pone un caso concreto: la informaci¨®n que utiliz¨® Fuster acerca de la estructura econ¨®mica valenciana al no existir entonces nada. Sabido es que Fuster, en su libro, cita un trabajo m¨ªo sobre la econom¨ªa valenciana del que se sirve para aportar una serie de datos y cifras acerca de nuestra realidad econ¨®mica en aquel momento en que est¨¢ escribiendo Nosaltres els valencians. El amigo Lluch muestra su inter¨¦s por ese trabajo y se pregunta. "?Est¨¢ el texto de Burguera entre los papeles de Fuster?. ?Existi¨® este papel? ?Lo posee Burguera?". Empezar¨¦ contestando sobre su existencia: S¨ª, el papel existi¨®. Se titulaba El Pa¨ªs Valenci¨¤ davant el Mercat Com¨². Y lo escrib¨ª para ser presentado a los Jocs Florals que convoca Lo Rat Penat cada a?o en Val¨¨ncia. La Fundaci¨® Ignasi Villalonga hab¨ªa ofrecido el Premi Marqu¨¦s de Campo, dentro del cartel de premios que ofrecen los Jocs, a un trabajo sobre el Pa¨ªs Valenciano y el Mercado Com¨²n. Present¨¦ mi trabajo y obtuve el premio. En todo caso supuso, como m¨ªnimo, una recopilaci¨®n, ordenaci¨®n y sistematizaci¨®n de las cifras y estad¨ªsticas que en aquel momento se ten¨ªan sobre nuestra econom¨ªa y a las que hace referencia Fuster en Nosaltres els valencians. Remito a mi libro Es m¨¦s senzill, encara: digueu-li Espanya, (3i4, pag. 223 y ss.) para conocer las cr¨ªticas que se han hecho a este pasaje de la obra fusteriana. El trabajo, por tanto, existi¨®. ?Existe todav¨ªa? Por lo que a m¨ª respecta, he de decir que no lo s¨¦. Tengo la esperanza, todav¨ªa, de encontrarlo entre el revoltijo de papeles almacenados en mi casa de El Perell¨®. Y el temor de que en un momento desgraciado y por circunstancias que no vienen al caso, con motivo de mi traslado a Madrid, hace muchos a?os, se hubiese perdido metido en un caja junto con otros papeles y libros, caja que desapareci¨® accidentalmente. Posiblemente -es mi esperanza- cuando me dedique a ordenar los papeles de El Perell¨®, aparezcan los folios de El Pa¨ªs Valenci¨¤ davant el Mercat Com¨² que merecieron el premio Marqu¨¦s de Campo. As¨ª las cosas, queda por contestar la otra pregunta que formula Lluch: "?Est¨¢ el texto de Burguera entre los papeles de Fuster?". No lo s¨¦.Y para terminar, una ¨²ltima referencia al citado art¨ªculo de Lluch. Dice el amigo Ernest que tal vez por su aislamiento en Sueca, "Fuster pens¨® que el Pa¨ªs Valenciano era muy parecido a Sueca o que Sueca era una muestra del Pa¨ªs Valenciano". No resulta muy cre¨ªble esta afirmaci¨®n. El mismo a?o que Fuster publica Nosaltres els valencians (1962) publica, tambi¨¦n, El Pa¨ªs Valenciano, su otro libro pol¨¦mico. No parece que despu¨¦s del conocimiento que le da su recorrido, de norte a sur, por todo el pa¨ªs, confunda ¨¦ste con Sueca. O viceversa.
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