La fiscal¨ªa apoya el uso de c¨¢maras para controlar recintos privados

La Fiscal¨ªa de Catalu?a defiende el uso de c¨¢maras de v¨ªdeo en recintos privados como los quir¨®fanos para vigilar al personal, seg¨²n se puso de manifiesto ayer en un juicio contra dos miembros del antiguo equipo de oftalmolog¨ªa de la cl¨ªnica Plat¨®n por intrusismo profesional. El Juzgado de lo Penal n¨²mero 3 de Barcelona comenz¨® a juzgar ayer a F. Ch. D. y M. G. R., cirujano y ATS, respectivamente, del desaparecido servicio aut¨®nomo de la citada cl¨ªnica y para quienes el fiscal pide una multa de seis millones de pesetas. El presunto delito de intrusismo imputado a los acusados se descubri¨® cuando la direcci¨®n de la cl¨ªnica instal¨® c¨¢maras de vigilancia en los quir¨®fanos para averiguar qui¨¦n maltrataba el material quir¨²rgico, a ra¨ªz de una queja presentada por el propio jefe del equipo oftalmol¨®gico, el doctor Demetrio Pita.El fiscal del caso, Miguel ?ngel P¨¦rez de Gregorio, ha dicho que, pese a que la jurisprudencia en la materia no es clara, las c¨¢maras de vigilancia s¨®lo est¨¢n prohibidas en domicilios privados, lo que no es este caso, y a¨²n as¨ª su colocaci¨®n en estos espacios estar¨ªa justificada por la persecuci¨®n de un delito grave. En contra de las tesis de la defensa, que afirma que las c¨¢maras vulneraron el derecho a la privacidad de los pacientes intervenidos en la cl¨ªnica entre abril y junio de 1998, en que hubo la videovigilancia, el fiscal asegura que nunca se pidi¨® identificar a esos pacientes y ha defendido que un ente privado, en este caso la direcci¨®n de una cl¨ªnica, pueda instalar las c¨¢maras si tiene sospechas del personal.

Las defensas de los acusados han pedido la nulidad de la causa al afirmar que un quir¨®fano es "un espacio herm¨¦ticamente cerrado y privado", como un lavabo p¨²blico, en el que no se puede instalar ninguna c¨¢mara que, por otro lado, puede ser foco de infecciones. Los letrados han alegado que la persecuci¨®n de un delito de intrusismo, castigado con una multa, o unos da?os en un instrumental m¨¦dico no justifican esa videovigilancia. Distinto ser¨ªa, han admitido, la investigaci¨®n de un delito grave, como un asesinato.