La fiscal¨ªa de Rusia dicta orden de busca y captura contra Gusinski, due?o del grupo Media Most
Se estrecha el cerco contra los oligarcas rusos que, hace cuatro a?os, hicieron posible la reelecci¨®n de Bor¨ªs Yeltsin para cobrarse luego sobradamente la factura por sus servicios. Con el presidente Vlad¨ªmir Putin en Mongolia, la fiscal¨ªa general dict¨® ayer orden de busca y captura contra Vlad¨ªmir Gusinski, patr¨®n de Media Most (principal grupo privado de comunicaci¨®n del pa¨ªs), citado a declarar, pero que no se present¨®. Ma?ana puede correr la misma suerte el m¨¢s genuino representante de los magnates protagonistas de la transici¨®n del comunismo al capitalismo: Bor¨ªs Berezovski.
Los fiscales investigan a Gusinski por fraude al negociar pr¨¦stamos con garant¨ªa de activos supuestamente inexistentes. El oligarca sostiene que es v¨ªctima de una persecuci¨®n pol¨ªtica por no poner su imperio al servicio del Kremlin. Curiosamente, ayer mismo, el grupo medi¨¢tico -cuyo mascar¨®n de proa es la cadena de televisi¨®n NTV- alcanz¨® un acuerdo amistoso -que debe ratificarse hoy- con su principal acreedor, el monopolio del gas Gazprom, para resolver su disputa sobre un cr¨¦dito de 40.000 millones de pesetas, clave te¨®rica de este embrollo.El vicefiscal general, Vasili Kolmog¨®rov, aclar¨® que ese compromiso no cambia nada, ya que a Gusinski se le persigue "seg¨²n el cuerpo del delito de sus acciones". Kolmog¨®rov sostiene que la orden de detenci¨®n podr¨ªa levantarse si Gusinski se presentase a declarar, y su testimonio lo justificase.
Las posibilidades de que el oligarca vuelva a Rusia son m¨ªnimas, despu¨¦s de lo que le cost¨® irse. "Mi cliente", dijo ayer el abogado Genri Reznik, "no quiere ser v¨ªctima de la ilegalidad y causar m¨¢s sufrimiento a los suyos". El letrado anunci¨® la presentaci¨®n de dos querellas: una criminal por la detenci¨®n de Gusinski en junio -fue encarcelado tres d¨ªas en la prisi¨®n moscovita de Butirka- y otra por su actual procesamiento.
Extorsi¨®n estatal
El pasado julio, el patr¨®n de Media-Most puso pies en polvorosa, rumbo a Espa?a -donde se encontraba su familia-, despu¨¦s de que, como por arte de magia, se retirase otra acusaci¨®n de fraude en su contra tras comprometerse a vender su imperio medi¨¢tico a Gazprom, con el aval del ministro de Informaci¨®n. Una vez fuera del pa¨ªs, Gusinski denunci¨® el trato como una "extorsi¨®n estatal" y se neg¨® a cumplirlo. Kolmog¨®rov afirm¨® el 1 de noviembre que, tanto Gusinski como Berezovski, ser¨ªan procesados, ¨¦ste ¨²ltimo por el supuesto desv¨ªo fraudulento a Suiza de fondos de la compa?¨ªa a¨¦rea Aeroflot. El fiscal dijo que ten¨ªa pruebas de la culpabilidad de los magnates, que, a?adi¨®, podr¨ªan ser detenidos.
Es inevitable tener la impresi¨®n de que la suerte de ambos oligarcas depende de algo m¨¢s que de las investigaciones de la fiscal¨ªa general, una instituci¨®n en teor¨ªa independiente del poder pol¨ªtico. Lo de menos parece ya que hayan o no violado la ley (nadie pondr¨ªa la mano en el fuego por ellos). Lo que suscita mayor inquietud es contemplar los sospechosos vaivenes del aparato de la justicia.
No s¨®lo Gusinski ha visto oscilar la balanza en la que se pesa su destino. Tambi¨¦n Berezovski estuvo ya procesado por el caso Aeroflot en 1998, cuando le ten¨ªa enfilado el primer ministro de entonces, Yevgueni Primakov. Cuando ¨¦ste, a su vez, cay¨® en desgracia, fruto, por cierto, de las intrigas del magnate, las acusaciones fueron retiradas. La ruleta rusa ha vuelto a girar y Berezovski corre peligro de nuevo.
As¨ª las cosas, no es de extra?ar que Gusinski no se presentase ayer, y tampoco lo ser¨ªa que ma?ana no lo hiciese Berezovski, aunque la peculiar personalidad de ¨¦ste ¨²ltimo hace dif¨ªcil el pron¨®stico.
El maquiav¨¦lico oligarca, considerado el Rasput¨ªn del Kremlin en tiempos de Yeltsin, no ha perdido a¨²n toda su influencia medi¨¢tica y econ¨®mica, aunque haya cedido el control de la primera cadena de la televisi¨®n (ORT).
Siempre se ha dicho que el poder le interesaba mucho m¨¢s que el dinero, y que su archivo de informes comprometedores sobre todo el que pinta algo en Rusia es su mejor seguro de vida. Por eso, si Berezovski diese con sus huesos en una celda de Butirka, ser¨ªa el s¨ªmbolo del fin de una ¨¦poca, el certificado ¨²ltimo de que el poder que hoy encarna Vlad¨ªmir Putin es, si no m¨¢s limpio (eso est¨¢ por ver), s¨ª de otra pasta, con claves y actores muy diferentes que en tiempos de Yeltsin.
Algo que ya se aprecia, por ejemplo, en el hecho de que el hombre de confianza del presidente sea un antiguo compa?ero del KGB, el hoy secretario del Consejo de Seguridad, Sergu¨¦i Ivanov.
Por otra parte, Vitali Filipov, 44 a?os, subdirector general de la empresa rusa extractora de gas Yamburgazdobycha fue tiroteado ayer en el portal de su domicilio y muri¨® poco despu¨¦s en un centro asistencial de Mosc¨², informa Efe. Seg¨²n las primeras investigaciones, un individuo dispar¨® varias veces contra Filipov, cuando ¨¦ste entraba en el portal del edificio.
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