Montoro provoca la divisi¨®n en el Consejo de Pol¨ªtica Fiscal

El ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, fracas¨® ayer en su intento de lograr un amplio consenso con las comunidades aut¨®nomas en torno a la denominada Ley de Estabilidad Presupuestaria, cuyo objetivo es la eliminaci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico para siempre. Al t¨¦rmino de la reuni¨®n del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera, Montoro s¨®lo hab¨ªa logrado el respaldo claro de las comunidades gobernadas por el Partido Popular (PP). Para el resto, aunque con matices, se trata de una ley innecesaria y que invade las competencias de las comunidades.

La divisi¨®n provocada por esta ley en el seno del Consejo sienta un mal precedente, ya que se produce en puertas de la negociaci¨®n que el Gobierno quiere abrir el pr¨®ximo mes de enero sobre el nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica que ha de entrar en vigor en 2002.La convocatoria de ayer ten¨ªa como objetivo lograr de las comunidades aut¨®nomas el compromiso de mantener para siempre un balance equilibrado en sus cuentas p¨²blicas, igual que en la Administraci¨®n central y los ayuntamientos. Ese compromiso se concretar¨¢ en una denominada Ley de Estabilidad Presupuestaria que Montoro quiere enviar al Congreso antes de final de a?o para su tramitaci¨®n.

En ella se prev¨¦ la obligaci¨®n de constituir un fondo del 2% sobre el gasto de cada a?o para afrontar pagos imprevistos y una penalizaci¨®n a aquellas administraciones que registren d¨¦ficit. En el Consejo est¨¢n representados los titulares de Hacienda de las 17 comunidades aut¨®nomas y los ministros de Hacienda y de Administraciones p¨²blicas junto a sus secretarios de Estado. En este foro pol¨ªtico es donde Montoro plante¨® la conveniencia de un ajuste en las cuentas p¨²blicas, de efecto indefinido y en l¨ªnea con el equilibrio presupuestario previsto para el a?o que viene.

De hecho, ya para 2001 est¨¢ previsto que las comunidades y los ayuntamientos tengan d¨¦ficit cero, mientras que el Estado registrar¨¢ un saldo negativo del 0,3% del PIB que quedar¨¢ cubierto por un super¨¢vit de la Seguridad Social en el mismo porcentaje. Pero Montoro choc¨® con la oposici¨®n frontal de las seis comunidades aut¨®nomas gobernadas por el PSOE (Andaluc¨ªa, Castilla-La Mancha, Baleares, Arag¨®n, Asturias y Extremadura), m¨¢s la del Pa¨ªs Vasco y Navarra, adem¨¢s de la de Catalu?a, aunque su consejero Artur Mas no asisti¨® a la reuni¨®n por que en el Parlamento catal¨¢n se debat¨ªan los presupuestos de esta comunidad. El d¨ªa anterior, Mas hab¨ªa criticado el proyecto del Gobierno por entender que invadir¨¢ competencias de las comunidades aut¨®nomas. Montoro le contest¨® con un rapapolvo: "Pido a los consejeros que hablen con responsabilidad respecto de esta ley; ha habido declaraciones muy poco afortunadas estos d¨ªas", dijo el ministro.

As¨ª las cosas, el ambicioso proyecto de garantizar mediante una ley que no habr¨¢ d¨¦ficit en el futuro s¨®lo cont¨® con el respaldo de las ocho comunidades gobernadas por el PP y una posici¨®n dudosa por parte de Canarias. Tanto Montoro como el consejero de Hacienda de Madrid, Manuel Cobo, salieron de la reuni¨®n convencidos de que el objetivo era generalmente aceptado, aunque no tanto el medio elegido y los plazos.

Para los socialistas, el equilibrio presupuestario es, en efecto, positivo pero no es necesaria una ley para garantizarlo y no se puede exigir un compromiso a las comunidades aut¨®nomas cuando a¨²n no conocen c¨®mo van a ser sus ingresos en los pr¨®ximos a?os porque a¨²n no se sabe c¨®mo ser¨¢ el nuevo sistema de financiaci¨®n.