Berl¨ªn exige a Madrid que renuncie al veto en los fondos de cohesi¨®n

La batalla por el veto sobre los fondos de cohesi¨®n vivi¨® ayer un nuevo episodio con las exigencias alemanas de que el derecho de veto desaparezca con efectos inmediatos. Mientras Espa?a defendi¨® la posici¨®n contraria (mantener el voto por unanimidad), la presidencia francesa complic¨® la situaci¨®n al proponer no s¨®lo que la pol¨ªtica estructural se decida por mayor¨ªa cualificada, sino que adem¨¢s las decisiones sean luego ratificadas por el Parlamento Europeo a trav¨¦s del llamado procedimiento de codecisi¨®n."Espa?a debe comprender que si se mantiene el veto eso es algo que no s¨®lo le afecta a ella, sino a todos los dem¨¢s pa¨ªses", sostuvo un portavoz alem¨¢n. La presidencia complic¨® a¨²n m¨¢s las cosas al eliminar, en su segunda propuesta de compromiso, la garant¨ªa de que "en el caso de que las perspectivas financieras no hayan sido adoptadas a 1 de enero de 2007 se retrasar¨¢ la fecha hasta su adopci¨®n".

A pesar de la posici¨®n oficial de Espa?a contraria a ceder el veto daba la sensaci¨®n de que era un no muy poco vigoroso y m¨¢s t¨¢ctico que de fondo. En la mente de la delegaci¨®n espa?ola parec¨ªa prevalecer el objetivo principal de no sufrir una derrota pol¨ªtica en el problema de los votos.

Al margen de ello, Espa?a no tiene una posici¨®n claramente definida en materia de cohesi¨®n. El ministro de Exteriores, Josep Piqu¨¦, defiende que Espa?a podr¨ªa renunciar al veto si tiene garant¨ªas de que podr¨¢ negociar el paquete financiero comunitario del periodo 2007-2013 manteniendo el derecho de veto en lo que afecta a los reglamentos de los fondos estructurales.

En cambio, los sectores m¨¢s duros del equipo negociador espa?ol sostienen que Espa?a no deber¨ªa ceder el veto al menos hasta el a?o 2013. La posici¨®n definitiva deber¨¢ tomarla el presidente del Gobierno.