Un nuevo conflicto del interventor malague?o con el edil de Hacienda bloquea pagos por 3.000 millones

Las discrepancias entre el concejal y el interventor han impedido la luz verde para unos 1.000 millones de pesetas en transferencias a Urbanismo que ten¨ªan que realizarse antes de fin de a?o. Tambi¨¦n se han retrasado el pago a Limasa por el servicio de limpieza y recogidas de basuras en la capital, y abonos a distintas empresas de servicio. Seg¨²n distintas fuentes municipales, en la misma situaci¨®n est¨¢n unas 800 facturas por adquisiciones y compras realizadas en los ¨²ltimos d¨ªas de diciembre, entre ellas la propia Cabalgata de Reyes o la Fiesta Mayor de Verdiales.

El conflicto tiene su origen en un informe del interventor municipal fijando el d¨ªa 23 de diciembre como plazo m¨¢ximo para la admisi¨®n de facturas por gastos efectuados. Carlos Claros se?alaba que, tras ese ¨²ltimo d¨ªa h¨¢bil, las obligaciones de pago que llegaran a su departamento no ser¨ªan ya incluidas en la liquidaci¨®n del presupuesto del ejercicio 2000. La comunicaci¨®n fue trasladada desde el ¨¢rea de Hacienda a todos los departamentos y distritos, y justificada en la necesidad de la Intervenci¨®n Municipal de cumplir con el precepto legal de tener realizada la liquidaci¨®n de un ejercicio antes del 1 de marzo.

Aguilar decidi¨® firmar un decreto habilitando el mes de enero de 2001 para tramitar todas las facturas llegadas hasta el 31 de diciembre y afirmando que estas obligaciones ser¨ªan reconocidas en el ejercicio que acaba de finalizar. La medida motiv¨® un segundo informe del interventor advirtiendo de que la segunda parte de la disposici¨®n era nula de pleno derecho y alertando de que 'las facturas hab¨ªan de ser reconocidas durante el a?o natural', ya que lo contrario dar¨ªa lugar a posibles devengos nulos. Ante ello, el edil de Hacienda se vio obligado a anular parte del decreto. Aguilar se mostr¨® ayer confiado en alcanzar una salida con el interventor, al entender que la soluci¨®n a trav¨¦s de posteriores reconocimientos de cr¨¦dito provocar¨¢ un indudable retraso en el pago.

El edil dej¨® entrever que la situaci¨®n es responsabilidad del interventor y dijo que no ten¨ªa precedentes en ejercicios anteriores. Otras fuentes municipales indicaron que el problema se ha agudizado, porque el propio Aguilar ha decidido tensar la situaci¨®n y considerar que el cierre del ejercicio el d¨ªa 23 de diciembre, impuesto por Intervenci¨®n, no s¨®lo debe afectar a las facturas, sino tambi¨¦n al ¨¢rea de contabilidad y ha bloqueado igualmente compromisos ya fiscalizados y que deb¨ªan abonarse.

El enfrentamiento entre el ¨¢rea de Hacienda e Intervenci¨®n surgi¨® tras una pretendida reorganizaci¨®n de este departamento municipal que supon¨ªa una p¨¦rdida de competencias del alto funcionario, en concreto de la tarea fiscalizadora. La iniciativa no prosper¨®, pero a finales de diciembre de 2000 el edil cre¨® una jefatura de contabilidad que situ¨® pr¨¢cticamente con el mismo rango de la intervenci¨®n, lo que ha sido tambi¨¦n denunciado por el Colegio de Interventores y Secretarios.

Hace apenas dos semanas, la Intervenci¨®n Municipal puso reparos a pagos efectuados por el Ayuntamiento en 1999 que sumaban m¨¢s de 540 millones de pesetas. El funcionario se?al¨® diversas irregularidades en la tramitaci¨®n. Este ¨¢rea municipal tambi¨¦n cuestion¨® la previsi¨®n de ingresos por impuestos y tasas municipales prevista por el equipo de gobierno del PP en el presupuesto municipal de 2001. El interventor opinaba que el ingreso real por impuestos ser¨ªa mucho menor.

Las discrepancias entre el concejal y el interventor han llevado al delegado de Urbanismo, Manuel Ramos, a decir p¨²blicamente que 'en este momento la mejor oposici¨®n en el Ayuntamiento es el interventor'.