El vicefiscal ruso viaja a Madrid para apoyar la extradici¨®n de Gusinski

El acoso de la fiscal¨ªa rusa a Media Most tiene contra las cuerdas al imperio period¨ªstico de Vlad¨ªmir Gusinski, en libertad provisional en su mansi¨®n de Sotogrande (C¨¢diz) mientras se decide sobre su extradici¨®n. El fiscal general adjunto, Vasili Kolmog¨®rov, y el jefe del departamento de investigaci¨®n de delitos de especial gravedad, P¨¢vel Barkovski, viajar¨¢n a Espa?a presumiblemente con documentaci¨®n para reforzar la petici¨®n de que el magnate, acusado de fraude masivo, sea entregado a la justicia de su pa¨ªs.

Barkovski admiti¨® ayer que se est¨¢n discutiendo con la parte espa?ola los detalles del viaje, y se?al¨® que el objetivo del mismo es 'la colaboraci¨®n en el marco de los acuerdos internacionales' y, en particular, sobre la petici¨®n de extradici¨®n de Gusinski. Aludiendo al car¨¢cter secreto del caso, no quiso dar detalles sobre qu¨¦ nuevos indicios de la culpabilidad del magnate se van a presentar, y tampoco especific¨® qui¨¦nes ser¨¢n sus interlocutores y los de Kolmog¨®rov.

Las acciones de la fiscal¨ªa contra el grupo Most y quien haya tenido algo que ver con ¨¦l se han multiplicado en los ¨²ltimos d¨ªas, en los que, por cierto, el presidente se ha reunido en el Kremlin con 3.500 fiscales (cuya labor ha elogiado) y con 32 directores de medios de comunicaci¨®n, a los que ha asegurado que la libertad de prensa no corre peligro en Rusia.

Ni siquiera el alcalde de Mosc¨², Yuri Luzhkov, se ha salvado de tener que declarar (lo ha hecho por escrito) sobre sus tratos con Gusinski, aunque es su ministro de Finanzas, Yuri Korosteliov, quien est¨¢ en la picota. Se le acusa de negligencia y abuso de poder en relaci¨®n con una deuda de 200 millones de d¨®lares (unos 35.000 millones de pesetas) del Banco Most (hoy desligado de Gusinski) al Ayuntamiento de la capital rusa, lo que en la crisis de 1998 deriv¨® presuntamente en un grave perjuicio econ¨®mico para la municipalidad.

El pasado martes, el interrogatorio del responsable de finanzas de Media Most, Ant¨®n Titov, termin¨® con ¨¦ste compartiendo con dos presos comunes una celda de la saturada prisi¨®n moscovita de Butirka, la misma de la que Gusinski fue hu¨¦sped durante tres d¨ªas de junio de 2000. La misma amenaza pesaba en teor¨ªa sobre el n¨²mero dos del magnate, Andr¨¦i Tsimailo, que negociaba con Ted Turner (fundador de la CNN) la venta de una participaci¨®n en la cadena de televisi¨®n NTV, la joya de la corona del grupo. Tsimailo falt¨® a la cita con el fiscal, y ayer se supo que hab¨ªa viajado a Londres para ser sometido a tratamiento m¨¦dico tras sufrir 'dolores de coraz¨®n'.

El trato con Turner parece que se ha ido al traste, y Gazprom Media (el monopolio del gas ruso), el gran acreedor de Gusinski, present¨® ayer una demanda para hacerse con el 19% de las acciones de la NTV, que serv¨ªan de garant¨ªa de un cr¨¦dito de 262 millones de d¨®lares. De tener ¨¦xito, el gigante del gas se har¨ªa con el control de la cadena, y ¨¦sta dejar¨ªa de ser un quebradero de cabeza para Putin. Gazprom acusa al grupo de comunicaci¨®n de violar un acuerdo que le obligaba a depositar en manos del Deutsche Bank esas acciones, parte de un paquete del 25% que se deb¨ªa vender a un 'inversor estrat¨¦gico' extranjero para garantizar la independencia de la cadena.

En Media Most se interpretan estas acciones, y los repetidos registros de las oficinas del grupo (el ¨²ltimo, ayer) como muestras de la decisi¨®n del Kremlin de liquidar la NTV, de cobertura nacional y cr¨ªtica con el poder y con Putin, que, seg¨²n Gusinski, tiembla de ira cada vez que se ve caricaturizado en la versi¨®n rusa de Los mu?ecos del gui?ol. Tambi¨¦n se sospecha que se trata, en parte, de una venganza por informaciones recientemente publicadas poco gratas a los fiscales.