Los inmigrantes que han denunciado en Gandia a un empresario temen represalias

Quince de los veinte inmigrantes que trabajaban en una urbanizaci¨®n de Pedreguer decidieron acudir a una asociaci¨®n de solidaridad y a la CGT en Gandia cuando el empresario rehus¨® pagarles el salario convenido. Llegaron incluso a hacer dos huelgas y paralizar la obra. Tras 13 d¨ªas de duro trabajo tan s¨®lo hab¨ªa percibido 20.000 pesetas. Ahora temen posibles represalias del empresario. 'En m¨ª pa¨ªs (Colombia) si te amenazan tienes una hora para abandonar lo que tengas y huir. Si no, est¨¢s muerto', se?ala Julio.

Cuando Julio lleg¨® a Espa?a el pasado 6 de noviembre, procedente de la ciudad de Cali Valle (Colombia), se sinti¨® un hombre afortunado. Acud¨ªa a Gandia tras los pasos de su compa?era sentimental y la hija de ambos, de 13 a?os, que se hab¨ªan instalado en la ciudad unos meses antes. Una semana tard¨® Julio en encontrar su primer empleo en la construcci¨®n. Todo un lujo, ya que lo habitual entre el colectivo de inmigrantes es esperar una media de uno o dos meses. Tan s¨®lo tuvo que responder a uno de los anuncios que habitualmente cuelgan en un locutorio de la ciudad, dirigido por y para inmigrantes. Un contratista intermediario le ofreci¨® la oportunidad de trabajar como pe¨®n en una urbanizaci¨®n de nueva construcci¨®n en Pedreguer (La Marina Alta). El pacto era 800 pesetas la hora, y el compromiso de que obtendr¨ªa un permiso de trabajo. Julio alquil¨® un piso con su pareja y su hija en Gandia y festej¨® su nueva suerte.

Julio conoci¨® a Pablo, natural de Quito (Ecuador) y de 27 a?os de edad, en la obra, donde trabajaban con otros 18 compatriotas, ecuatorianos y colombianos. Ambos prefieren ocultar su verdadera identidad, por lo que los nombres utilizados en este reportaje son ficticios. Pablo hab¨ªa conseguido reunir las 160.000 pesetas del billete y el dinero suficiente para presentar en el aeropuerto 'y que se crean que vienes de turista'. En junio de 1999 lleg¨® a Espa?a. Julio y Pablo son dos de los quince inmigrantes que el pasado 19 de diciembre presentaron cargos contra un empresario de Denia, G.S.M, y el contratista E.A.F., por 'explotaci¨®n laboral' y por el impago de unos dos millones de pesetas. G.S.M. gestionaba cuatro obras en La Marina Alta, y dispon¨ªa de un piso en D¨¦nia en el que alojaba a 14 inmigrantes sin papeles, procedentes de Madrid y otras localidades, previo pago de 70.000 pesetas en concepto de alquiler y manutenci¨®n, seg¨²n los denunciantes. La jornada laboral era de una media de nueve horas, de lunes a s¨¢bado.

En la comarca de La Safor viven en la actualidad cerca de un millar de inmigrantes, seg¨²n datos de la Asociaci¨®n Papers per a Totes i Tots. La cifra es aproximativa, ya que es muy dif¨ªcil controlar el n¨²mero de sin papeles que residen en la zona. Seg¨²n el Centro de Informaci¨®n al Inmigrante de CC OO, en la Comunidad Valenciana hay unos 10.000 extranjeros extracomunitarios, 5.000 de ellos afincados en la provincia de Valencia, el 60% sin regularizar. La mayor¨ªa proceden de los pa¨ªses del Este y Latinoam¨¦rica, y son captados para trabajar en la construcci¨®n, la recogida de naranja y, en el caso de las mujeres, en el servicio dom¨¦stico. Desde el accidente de Lorca (Murcia), el pasado 13 de enero, en el que 12 ecuatorianos murieron tras ser arrollada la furgoneta en la que viajaban por un tren en un paso a nivel sin barreras, 'los agricultores han dejado de ofrecernos trabajo', lamenta Pablo.

Para estos trabajadores, la soluci¨®n a su situaci¨®n es el clamor de todo el colectivo de inmigrantes residentes de Espa?a: 'la agilizaci¨®n por parte de la Administraci¨®n de los permisos de trabajo'. 'Hay muchos empresarios que nos han ofrecido contratos, pero no nos emplean porque el gobierno no facilita los papeles', argumenta Julio. La propuesta del gobierno del PP de ofrecer a los indocumentados un contrato de trabajo en Espa?a con la condici¨®n de que regresen a su pa¨ªs para hacerse con un visado es, para Pablo, 'inaudita y una trampa'.

Ma?ana lunes, la asociaci¨®n Papers per a Totes i Tots y la CGT han convocado una concentraci¨®n ante al Ayuntamiento de Gandia para denunciar 'la explotaci¨®n laboral' de los trabajadores extracomunitarios residentes en La Safor.