Suficiente y extra?o

Primer festejo taurino del milenio en Madrid capital. Ha comenzado el siglo XXI y estamos inmersos en la pel¨ªcula de las vacas locas. En el coso cubierto de Vistalegre, una novillada picada de juego desigual, pero con momentos interesantes, ofrece un espect¨¢culo suficiente y extra?o.

En primer lugar tore¨® ?ngel Romero, que en los lances a su primero dej¨® muestras de sus finas maneras en las ver¨®nicas por el pit¨®n derecho. En la faena de muleta lleg¨® a dibujar muletazos de buen trazo y dej¨® constancia de que tiene en sus mu?ecas el misterio del temple. En su segundo, que lleg¨® al ¨²ltimo tercio en plan marmolillo, derroch¨® voluntad y remat¨® su labor con un excelente volapi¨¦. Manej¨® el capote en quites con originalidad y evidenci¨® buen juego de brazos en los lances a la ver¨®nica.

Jos¨¦ Luis Trivi?o gust¨® al respetable por su entrega y valor. Su primera faena transcurri¨® casi toda por el pit¨®n derecho. Corri¨® la mano largo y tendido en alg¨²n muletazo suelto. Su segundo se peg¨® dos fuertes volteretas de salida al humillar en demas¨ªa sobre la arena, sali¨® renqueante del primer encuentro con el picador y fue devuelto. En su lugar soltaron un sobrero del hierro titular y result¨® el bomb¨®n del festejo. Trivi?o le dio distancia en el ¨²ltimo tercio, se par¨®, templ¨® y mand¨® en dos series sobre el pit¨®n derecho, ligadas y bien dichas.

Jes¨²s Carrasco apunt¨® clase en las ver¨®nicas de saludo a su primero y en los muletazos que le pudo robar. En su segundo, faena de empaque y gusto, limpio el surco sobre el albero, en el toreo al natural.

Fin del espect¨¢culo. El desolladero de la plaza est¨¢ cerrado a cal y canto. El ¨²ltimo novillo del festejo es izado por un cami¨®n gr¨²a y embaulado. Va camino de una incineradora.