Caj¨®n de sastre
Lo peor de la ¨²ltima ocurrencia del Ayuntamiento de Valencia, la de instalar un trenet en el Jard¨ªn del Turia, es que puede llegar a convertirse en realidad y agravar los problemas que la improvisaci¨®n y la ausencia de planificaci¨®n han generado en este valios¨ªsimo espacio urbano, un parque que atraviesa la ciudad de parte a parte y que podr¨ªa constituir un potente eje vertebrador si no fuera porque nuestros mun¨ªcipes echan mano de ¨¦l casi para cualquier cosa y lo han convertido en un caj¨®n de sastre en el que cabe de todo. As¨ª, la realidad actual del viejo cauce del r¨ªo es muy distinta de la que proyect¨® en su d¨ªa Ricardo Bofill. Y no es que el dise?o del arquitecto catal¨¢n fuera el ideal, pero se trataba de un proyecto global que entend¨ªa el viejo lecho del Turia como una unidad estructural del conjunto urbano, con una idea de continuidad que contribu¨ªa a vertebrar la ciudad. Sin embargo, las propuestas de Bofill cayeron en saco roto y los sucesivos gobiernos municipales propusieron y llevaron a cabo intervenciones que han acabado por convertir el Jard¨ªn del Turia en un espacio ca¨®tico. Instalaciones deportivas y de juegos y ocio, ¨¢rboles plantados sin pensar en su porte futuro, zonas dedicadas a viveros, grandes explanadas para el disparo de fuegos artificiales o para cocinar enormes paellas jalonan el recorrido desde el frente mar¨ªtimo hasta Mislata. Un desorden que ha contribuido tambi¨¦n a una singular especializaci¨®n del Jard¨ªn del Turia, que gracias a ello dispone de zonas de camellos y drogatas, de ¨¢reas dormitorio, de n¨²cleos de prostituci¨®n, de vertederos urbanos, de espacios para jubilados y ni?os... Menos mal que ya no caben las autopistas que planificaron las autoridades franquistas. As¨ª, recorrer el viejo cauce constituye toda una aventura, porque uno puede encontrarse casi con cualquier cosa. Ahora que caigo, a lo mejor es que, con el proyecto del trenet lo que pretende el Ayuntamiento es precisamente facilitar a los ciudadanos la contemplaci¨®n de todo ese caos. Aunque, la verdad, visto lo que hay, casi ser¨ªa mejor instalar varios trenes tem¨¢ticos.
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