M¨¢s de 200.000 refugiados, atrapados entre fuego cruzado en Guinea-Conakry
El alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Ruud Lubbers, advirti¨® ayer del peligro de cat¨¢strofe humanitaria en Guinea-Conakry, donde m¨¢s de 200.000 refugiados est¨¢n atrapados por el fuego cruzado del Ej¨¦rcito y grupos rebeldes y carecen de suministro de comida y medicinas. Lubbers hizo esta advertencia poco antes de concluir ayer su visita a ese pa¨ªs, primera etapa de una gira por ?frica occidental, para entrevistarse con las autoridades locales y buscar una soluci¨®n a los problemas de los desplazados. El diplom¨¢tico de la ONU visit¨® dos campamentos en la regi¨®n forestal y la regi¨®n sureste del pa¨ªs donde los combates entre el Ej¨¦rcito y los rebeldes del Movimiento para la Liberaci¨®n de Guinea-Conakry (MLGC) han puesto en peligro la vida de decenas de miles de refugiados, en su mayor¨ªa sierraleoneses y liberianos.
En Massakoundou, a siete kil¨®metros de Kissidougou, uno de los principales centros urbanos del sureste de Guinea-Conakry, Lubbers recorri¨® un campamento instalado hace diez a?os por ACNUR y que alberga en la actualidad a unas 35.000 personas. A su llegada al campo, Lubbers fue acogido por los desplazados con gritos de desesperaci¨®n: 'Queremos volver a casa', dec¨ªan. Lubbers invit¨® a Guinea-Conakry, Sierra Leona y Liberia a restaurar la paz en la zona, y a la comunidad internacional a que suministre la ayuda necesaria para hacer frente a los graves problemas de este masivo ¨¦xodo. ACNUR realiza desde hace semanas una amplia operaci¨®n de ayuda que consiste en trasladar a decenas de miles de refugiados de las zonas de combate en la regi¨®n sureste a ¨¢reas m¨¢s al norte.
Otro motivo de preocupaci¨®n para el alto comisionado es la situaci¨®n de los 140.000 refugiados bloqueados en la regi¨®n del Pico de Loro, una estrecha franja de tierra que se prolonga en territorio de Sierra Leona. A fin de paliar la situaci¨®n, Lubbers dijo que tanto el Gobierno de Conakry como los de Liberia y de Sierra Leona deben colaborar con ACNUR para crear corredores de seguridad, y tambi¨¦n se mostr¨® dispuesto a dialogar con los responsables del movimiento rebelde sierraleon¨¦s, el Frente Revolucionario Unido (RUF). Unos 300.000 refugiados procedentes de Sierra Leona y otros 122.000 de Liberia huyeron hacia el sur de Guinea-Conakry durante la d¨¦cada de los a?os noventa, tratando de escapar de las guerras civiles que entonces asolaban a sus respectivos pa¨ªses.
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