La gesti¨®n de las harinas c¨¢rnicas prohibidas costar¨¢ al Consell m¨¢s de 1.200 millones de pesetas anuales
La enfermedad de las vacas locas, como comunmente se conoce a la Encelopat¨ªa Espongiforme Bovina (EEB), una enfermedad mortal transmisible a los humanos, ha cambiado los motivos para fabricar harinas c¨¢rnicas. As¨ª, si hasta finales de 2000 los despojos de las reses sacrificadas se utilizaban para hacer piensos alimenticios para animales ahora ¨¦stos son s¨®lo una forma de esterilizaci¨®n (a 133 grados, tres atm¨®sferas de presi¨®n y 20 minutos se destruye el pri¨®n que causa la enfermedad) de los despojos y un m¨¦todo para convertirlos en un producto m¨¢s f¨¢cil de transportar. Y los m¨¢s importante: estos piensos han pasado a considerarse como residuos.
?Qu¨¦ pasa despu¨¦s con estas harinas, que el fabricante no puede vender a sus viejos clientes? La Consejer¨ªa de Agricultura y el ministerio del ramo compran toda la producci¨®n a un coste de entre 40 y 43 pesetas el kilo. S¨®lo en este sector, la crisis de las vacas locas costar¨¢ en la Comunidad Valenciana alrededor de 1.600 millones de pesetas. Si a los 800 millones que sufraga el Consell se le suman los 480 que deber¨¢ pagar a las cementeras, la factura de las harinas costar¨¢ al Consell 1.280 millones.
De momento, las harinas de la Comunidad, unas 3.000 toneladas al mes (menos del 10% corresponde a harinas MER, que incluyen materiales espec¨ªficos de riesgo, susceptibles de contener el pri¨®n), van a parar a tres vertederos controlados, uno por provincia. Aspe en Alicante, Alpuente en Valencia y, ya en Castell¨®n, Alcora, el ¨²nico vertedero apto para harinas MER.
Si estos materiales se pueden enviar legalmente a vertederos ?por qu¨¦ incinerarlos en cementeras? En primer lugar, por un problema de espacio, ocupan mucho y restan espacio a las basuras dom¨¦sticas. Y tambi¨¦n para doble seguridad, ya que el pri¨®n no sobrevive a temperaturas de 1.500 grados.
Una vez tengan todos los permisos, las cementeras acometer¨¢n las obras (nuevos silos y tolvas, conductos neum¨¢ticos, alimentadores...). Lafarge Asland cifr¨® ayer el coste de las obras, que durara¨¢n entre cinco y seis meses, entre 200 y 250 millones de pesetas.
Por su parte, los ecologistas, contrarios a las incineradoras, exigen que se extremen las mediciones de las emisiones. La semana pasada Els Verds han solicitado que se elabore un estudio de impacto ambiental antes de que el horno de Sant Vicent queme harinas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Incineradoras basura
- Prevenci¨®n enfermedades
- Piensos
- Legislaci¨®n sanitaria
- Nutrici¨®n animal
- Instalaciones residuos
- Conflictos comerciales
- Comunidades aut¨®nomas
- Vacas locas
- Comunidad Valenciana
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Pol¨ªtica sanitaria
- Enfermedades ganado
- Ganader¨ªa
- Espa?a
- Sanidad
- Medicina
- Equipamiento urbano
- Urbanismo
- Agroalimentaci¨®n
- Administraci¨®n p¨²blica
- Salud
- Comercio
- Sociedad