Un mill¨®n de cristianos, una pl¨¦yade de ritos

De los 17 millones de habitantes que tiene Siria, un mill¨®n son cristianos, divididos en tres confesiones diferentes y una pl¨¦yade de ritos. Los cat¨®licos se reparten entre seis ritos: melquitas, sirios, armenios, maronitas, latinos y caldeos. Todos ellos reconocen la primac¨ªa del obispo de Roma y son el resultado de diversas circunstancias hist¨®ricas que ha atravesado el cristianismo en Oriente Pr¨®ximo: el imperio bizantino, la dominaci¨®n isl¨¢mica o las cruzadas, entre otras.

Algunos de estos ritos cat¨®licos admiten en sus filas a sacerdotes casados, aunque ¨¦stos no pueden ser promovidos al obispado, para lo cual el celibato es una condici¨®n imprescindible. Los dem¨¢s cristianos sirios se integran en diversas ramas de la ortodoxia (griega, siria, armenia y asiria) y en unas pocas congregaciones evang¨¦licas.

A pesar de ser considerado un pa¨ªs musulm¨¢n, la Constituci¨®n siria no reconoce como oficial a ninguna religi¨®n y ¨²nicamente establece que el islam es la religi¨®n del jefe del Estado, pero no la de su poblaci¨®n. En este sentido la estrategia del partido oficial Baaz, en el poder desde 1964, es integrar a la poblaci¨®n de todos los credos no bajo la bandera del islamismo, sino en un concepto m¨¢s amplio, difuso y ambiguo como el de 'arabidad'.

Adem¨¢s, el Estado permite a la Iglesia la compra de terrenos y la construcci¨®n de iglesias, aparte de excluir a los sacerdotes del servicio militar. La Iglesia se encuentra entre uno de los sectores m¨¢s favorables al actual Gobierno sirio, precisamente por la lucha contra el integrismo isl¨¢mico (eso s¨ª, a trav¨¦s de una dura represi¨®n y s¨®lo para el interior de pa¨ªs, no para el exterior) que ha lanzado el Ejecutivo de Damasco.

Sin embargo, los cristianos sirios se quejan del f¨¦rreo control que el r¨¦gimen de El Asad ha establecido sobre todo lo que suponga contactos con el exterior, lo que afecta no s¨®lo a los particulares, sino a las diversas iglesias cristianas como instituciones. Aunque oficialmente no hay discriminaci¨®n, fuentes vaticanas se?alan que desde 1958 han abandonado el pa¨ªs m¨¢s de 250.000 cristianos sirios, muchos de ellos temerosos del servicio militar.