Educaci¨®n contra la intolerancia

'Se quedan embelesados cuando les hablo'. La hondure?a Alicia Papp es una de las personas que colaboran con SOS Racisme en el Sal¨®n de Educaci¨®n Intercultural que ha puesto en marcha la semana pasada en el museo de la Benefic¨¨ncia de Valencia. A Alicia le corresponde poner en contacto a los 700 chavales de institutos valencianos que han pasado por el sal¨®n con la cultura latinoamericana y, de esta forma, quebrar los prejuicios que acompa?an a los escolares. Nada mejor que un recorrido por las ra¨ªces de esta mujer para romper con estereotipos. 'Mi abuelo materno es madrile?o, mi bisabuelo naci¨® en Dos Aguas, cerca de Valencia, mi abuelo paterno era h¨²ngaro [del que conserva el apellido], el padre de mi madre era madrile?o y su madre, libanesa', comenta al grupo de adolescentes. Es su forma de decirles que desconf¨ªen de las apariencias y pierdan de vista las etiquetas. 'Vosotros sab¨¦is d¨®nde hab¨¦is nacido pero no d¨®nde vais a acabar', les advierte, '?c¨®mo cre¨¦is que responder¨ªa mi abuelo madrile?o si le dijeran que sus paisanos tratan mal a su nieta por ser latinoamericana?'.

El espacio dedicado a Am¨¦rica Latina es s¨®lo una de las ¨¢reas en las que est¨¢ repartido el sal¨®n de educaci¨®n, que este a?o va por su cuarta edici¨®n. Otros de los espacios tem¨¢ticos est¨¢n dedicados al pueblo gitano, el Magreb, el ?frica Subsahariana. A ellos se suma el ¨¢rea antirracista, la que recibe a los escolares y les introduce en las distintas culturas del mundo. Los alumnos, de edades comprendidas entre los 14 y 19 a?os, acuden a la Benefic¨¨ncia para recibir -m¨¢s bien participar- en una clase pr¨¢ctica, despu¨¦s de haber realizado los talleres y actividades durante el curso escolar, unos materiales elaborados tambi¨¦n por SOS Racisme.

El ¨¢rea dedicada a los gitanos es otra de las que despierta mayor atenci¨®n entre los alumnos de los institutos de Benicalap, Algemes¨ª, Benifai¨®, l'Oliveral, Balears o el Barrio del Cristo que a lo largo de la semana pasada participaron en las actividades desarrolladas en el museo. Gran parte del ¨¦xito de este espacio corresponde al mediador gitano Emilio Moliner, de 20 a?os, el encargado de introducir a los j¨®venes en su cultura.

Falta de medios

Silvia Mateo se lamenta de la falta de medios, que impide que el sal¨®n pueda celebrarse durante m¨¢s tiempo. Pese a ello, la semana se vive de forma intensa. 'Pretendemos que observen la riqueza de la diversidad', apunta, 'y que se relacionen con otras culturas'. Pero no s¨®lo eso. En la muestra hay un recuerdo para la manifestaci¨®n racista de Russafa de hace cuatro a?os, para que los escolares no s¨®lo sean conscientes de la riqueza del intercambio cultural, sino de los peligros que acompa?an a la intolerancia. Unas fotograf¨ªas muestran con crudeza la exhibici¨®n racista que desplegaron algunos de los miembros m¨¢s destacados de la ultraderecha valenciana.