El 'escudo espacial' y Kioto enfrentan a Bush con los l¨ªderes europeos
A sus 54 a?os, George Bush a¨²n no ha estado nunca en Londres, Par¨ªs o Berl¨ªn. Ahora, como presidente de EE UU, realiza su primera visita oficial a una Europa por la que ha mostrado tan poco inter¨¦s. Invitado a viajar esta semana a Gotemburgo, donde se celebra primero la reuni¨®n UE-Estados Unidos, el d¨ªa 14, y luego la cumbre europea, el 15 y el 16, la entrada de Bush en Europa hubiera sido por la puerta pol¨ªtica, un terreno en el que ambos lados del Atl¨¢ntico mantienen un di¨¢logo m¨¢s equilibrado de poder. Pero sus asesores se encargaron de modificar los planes para que su primer contacto con los l¨ªderes europeos, tras el pr¨®logo de su paso por Madrid, fuera por la puerta de la defensa, de modo que el d¨ªa 13 estar¨¢ en Bruselas en el Consejo de la OTAN, donde el liderazgo y la supremac¨ªa norteamericana es incontestable.
'Ha sido un dato esclarecedor sobre c¨®mo enfoca la nueva Administraci¨®n de EE UU su relaci¨®n con Europa', opina un portavoz oficial en Bruselas. El listado de desencuentros engorda cada semana. A los heredados litigios comerciales (prohibici¨®n europea de importar carne hormonada, limitaci¨®n a la entrada de productos gen¨¦ticamente modificados, denuncia a las tabaqueras o incluso el espionaje industrial de la red Echelon) se han sumado las reticencias de EE UU a la iniciativa europea de defensa, la imposici¨®n del escudo antimisiles a unos Gobiernos europeos cada vez m¨¢s resignados a aceptarlo a cambio de ser 'consultados' y, sobre todo, el rechazo de Bush a suscribir el protocolo de Kioto para limitar la emisi¨®n de gases de efecto invernadero.
Discrepancias y litigios
Las discrepancias en alguno de esos litigios ha quedado tan obvia que, mientras EE UU tilda de Estado rebelde a Corea del Norte y cita a este pa¨ªs como potencial peligro del que hay que defenderse con el escudo, la UE lo visit¨® oficialmente el mes pasado y promovi¨® f¨®rmulas de entendimiento con el r¨¦gimen norcoreano. El viernes, el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, insisti¨® en sus reservas ante el macroproyecto americano. Ahora, Europa conf¨ªa en que Bush y el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, con quien tambi¨¦n se ver¨¢ esta semana, logren aproximar posiciones para evitar una escalada de armamento a cuenta del escudo antimisiles.
Pero ser¨¢ el contencioso sobre Kioto el que protagonice la reuni¨®n de Bush con los l¨ªderes de la UE. Los ministros de Medio Ambiente atizaron el fuego el jueves al comprometerse por escrito a respetar Kioto. G?ran Persson, primer ministro sueco, ya ha dicho que 'la UE dejar¨¢ claro a EE UU que van a mantener sus compromisos' sobre Kioto.
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