El Ni?o que act¨²a como un veterano
El Open de Estados Unidos es un espacio geogr¨¢fico de geometr¨ªa variable: el torneo que en 2001 celebra su 101? edici¨®n transforma en templo del golf los clubes en que se celebra. As¨ª, estos d¨ªas no hay lugar tan sagrado como el Southern Hills, en un sitio tan poco m¨¢gico como Tulsa (Oklahoma), Medio Oeste, praderas y tornados.
All¨ª, en el lugar elegido por Hale Irwin, el m¨¢s viejo ganador de un Open (45 a?os ten¨ªa cuando consigui¨® su tercera copa, all¨¢ por 1990), para, ya pelo casi totalmente blanco, darse un ba?o rejuvenecedor y liderar por un d¨ªa en el siglo XXI, y en el mismo sitio donde Tiger Woods intentar¨¢ batir otro r¨¦cord, el de la m¨¢s grande remontada de la historia, all¨ª mismo Sergio Garc¨ªa, el joven de Castell¨®n, el conocido como El Ni?o, para actuar como un verdadero veterano, acompa?ando, adem¨¢s, el discurso con la acci¨®n.
"Este es un deporte de paciencia, y este torneo lo ganar¨¢ el m¨¢s paciente", declar¨® nada m¨¢s aterrizar. "Dicho esto, estoy impaciente por empezar a jugar y demostrar que ya s¨¦ ser paciente". Sergio Garc¨ªa lleg¨® a Tulsa en racha exitosa, con un primero y un segundo puestos en los dos ¨²ltimos torneos jugados.
La primera ronda la jug¨® paciente y la termin¨® al par. La segunda ronda no hab¨ªa terminado al cierre de esta edici¨®n, pero, salvo cataclismo, Garc¨ªa podr¨¢ jugar todav¨ªa una tercera y una cuarta para seguir demostrando su compromiso, un derecho por el que luchaban Miguel ?ngel Jim¨¦nez y Jos¨¦ Mar¨ªa Olaz¨¢bal, en el filo del corte.
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