'Un fiscal que est¨¢ en su despacho y no recibe a la gente incumple sus obligaciones'
Hay mucha desconfianza en todas las instituciones y, entre otras, en la Justicia'
El pasado 8 de junio el Consejo de Ministros nombr¨® al extreme?o Jes¨²s Garc¨ªa Calder¨®n, de 41 a?os, fiscal jefe de Andaluc¨ªa en sustituci¨®n del asesinado Luis Portero. El nuevo fiscal, que ocupaba hasta ahora la plaza de Lugo, es un hombre cauto que, sin embargo, arrastra consigo ideas audaces y apuesta por la transparencia informativa.
Pregunta. ?Le cost¨® mucho plantear su candidatura para fiscal jefe de Andaluc¨ªa?
Respuesta. Fue una decisi¨®n que cualquier fiscal que haya trabajado en Andaluc¨ªa tanto tiempo, como es mi caso, tiene presente. La idea surgi¨® de algunas conversaciones con compa?eros. Fue una decisi¨®n que adopt¨¦ con suficiente tranquilidad, meditada pero no durante mucho tiempo.
P. Su antecesor, Luis Portero, fue asesinado por ETA. ?C¨®mo pesa una antecedente de tal magnitud a la hora de optar al puesto?
R. El temor es una circunstancia muy personal y no se tiene o se deja de tener por hechos que escapan al control de uno. Es una situaci¨®n muy an¨®mala, extra?a. Cualquier jefatura de un tribunal superior reviste una extraordinaria dificultad, pero ¨¦sta, por la circunstancia a las que aludes, reviste una dificultad a¨²n m¨¢s especial. Adem¨¢s hay una tercera circunstancia, la talla personal y profesional de Portero, el primer fiscal jefe del TSJA. Siento m¨¢s un temor a estar a la altura de las circunstancias que a otra cosa.
P. Sin embargo, por los antecedentes de la muerte de Portero, su vida personal va a cambiar respecto a la que llevaba en Lugo. ?Es consciente?
R. La vida personal cambia poco, porque es la que se despliega sobre el ¨¢mbito de la privacidad. El que yo tenga que acudir a ciertos lugares o tenga que adoptar determinadas medidas es algo coyuntural. La libertad es una condici¨®n muy personal, una magnitud espiritual y en ese aspecto no va a cambiar nada.
P. Usted tiene 41 a?os, es una persona abierta, escribe libros de ensayo y creaci¨®n. ?Se considera un fiscal at¨ªpico?
R. No estoy de acuerdo en absoluto. Ricargo Gull¨®n, uno de los mejores cr¨ªticos literarios, tambi¨¦n ejerci¨® como fiscal jefe. Ese concepto de la normalidad o anormalidad en funci¨®n de las aficiones no es admisible. Machado era profesor de franc¨¦s. Lo que tengo claro es que no se debe mezclar la afici¨®n con el trabajo, son dos magnitudes diferentes. Respecto a la edad, el estatuto exige 15 a?os de antig¨¹edad. Un hombre, como dec¨ªa Miguel Torga, es la juventud que tenga dentro de ¨¦l. Quiz¨¢ haya personas mayores que tengan m¨¢s juventud que yo, o quiz¨¢ yo, con mi edad, sea m¨¢s anciano que otros. La edad es una circunstancia importante, aunque la madurez se puede alcanzar a una edad m¨¢s temprana. Eso no quiere decir que me considere un hombre excesivamente maduro. Una persona joven puede atesorar otras virtudes como la fuerza, el empuje y la ilusi¨®n, adecuadas a estos tiempos.
P. ?Se puede esperar un estilo nuevo en la Fiscal¨ªa?
R. La Fiscal¨ªa no tiene que tener un estilo nuevo. Tiene una obligaci¨®n constitucional y lo que hay que esperar de ella es lo que establece la Constituci¨®n. Yo lo que digo a la gente es que conf¨ªe en la Justicia y acuda a ella cuando lo estime necesario.
P. Pero hay mucha desconfianza en la Justicia.
R. Hay mucha desconfianza en todas las instituciones y, entre otras, en la Justicia. Tambi¨¦n hay desconfianza en los medios de comunicaci¨®n, en la educaci¨®n y la sanidad. Hay desconfianza porque quiz¨¢ asistimos a un momento fundamental en la regulaci¨®n de las sociedades democr¨¢ticas. Yo creo que esa desconfianza en la Administraci¨®n de Justicia s¨®lo pone en evidencia que serie de hechos. Uno ser¨ªa que se produzca un control adecuado de ella por los medios de comunicaci¨®n. Nosotros dos, en esta entrevista, de alguna manera contribuimos a luchar contra esa desconfianza porque una de las razones fundamentales de los medios es establecer la publicidad de los procesos penales que sirve a su vez para intensificar el principio de confianza de la ciudadan¨ªa.
P. Uno de sus proyectos inmediatos es crear una fiscal¨ªa exclusiva para investigar la siniestralidad laboral.
R. Bueno, es una orden que emana de una instrucci¨®n del fiscal general del Estado. He tenido la oportunidad de crear el servicio en Lugo. Hemos tenido reuniones interesantes con la inspecci¨®nn de Trabajo y tenemos previsto otras con los sindicatos y parece indispensable crear este servicio aqu¨ª en Granada e incentivar otros como el de la violencia familiar, inmigraci¨®n y menores. Esta es una cosa que ha nacido hace poco tiempo y tiene una gran importancia.
P. En los primeros a?os de funcionamiento, la Fiscal¨ªa andaluza se convirti¨® en una suerte de oficina de queja de los ciudadanos. ?Es esta una de sus funciones?
R. Entre las muchas ocupaciones de la Fiscal¨ªa est¨¢ la de ayudar a toda persona que se considere injustamente tratada por la Administraci¨®n P¨²blica o por el Estado. Esta es una de las m¨¢s honrosas obligaciones que tienen los fiscales. Eso no quiere decir que haya que poner algunos filtros si esas visitas son excesivas. Pero si un fiscal no recibe a la gente y se encierra en su despacho no est¨¢ cumpliendo con sus obligaciones.
Patrimonio hist¨®rico P. Usted es autor de algunos libros sobre protecci¨®n penal del patrimonio hist¨®rico y ha sido muy cr¨ªtico con el C¨®digo Penal. Ahora ocupa la Fiscal¨ªa de una comunidad con un patrimonio important¨ªsimo.
R. La respuesta del C¨®digo Penal es insuficiente y eso ha sido constatado por la propia Fiscal¨ªa General. La respuesta es inadecuada porque la redacci¨®n fue muy apresurada. La sensibilidad en materia de patrimonio no es exclusiva de Andaluc¨ªa. Es asombroso que el inter¨¦s de todas las comunidades en esta materia. El C¨®digo Penal deber¨ªa ser modificado sustancialmente y en eso est¨¢n de acuerdo todos los autores.
P. Con el actual C¨®digo y teniendo en cuenta el valioso patrimonio andaluz ?no aprecia un vac¨ªo peligroso?
R. El aspecto criminal es uno de los muchos que tiene el patrimonio. En Andaluc¨ªa es el principal activo, la primera fuente de ingresos, y se debe proteger de una manera razonable y generosa. Y no es f¨¢cil. Parece que una conservaci¨®n a ultranza podr¨ªa ser contraproducente. Los cascos hist¨®ricos sufren tanto el exceso de proteccionismo como su falta. Algunos juristas intentamos establecer un equilibrio exacto entre la conservaci¨®n y el desarrollo.
P. El puesto de fiscal jefe ha permanecido desocupado desde que el 9 de octubre pasado fuera asesinado Luis Portero. ?Se ha acumulado mucho retraso?
R. No hay acumulaci¨®n de trabajo, La fiscal¨ªa ha funcionado con normalidad. S¨®lo he girado una visita de cortes¨ªa sin haber formalizado mi toma de posesisi¨®n [prevista para dentro de unos quince d¨ªas] y he observado, en una primera impresi¨®n, una Fiscal¨ªa que funciona. Ya habr¨¢ tiempo para examinar m¨¢s a fondo los papeles. He ojeado las memorias de las fiscal¨ªas provinciales, pero la de Andaluc¨ªa, afortunadamente, hasta la pr¨®xima primavera, no la debo elaborar.
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