El amargo doblete de Antic
El entrenador del Oviedo lleva dos descensos consecutivos a Segunda
En poco m¨¢s de 13 meses, Radomir Antic ha coleccionado un doblete muy distinto a aqu¨¦l que le situ¨® en 1996, con el Atl¨¦tico de Madrid, en la cima como entrenador. El domingo, en Palma de Mallorca, el serbio consum¨® su segundo descenso consecutivo, un amargo colof¨®n para una temporada que le ha dejado malparado en todos los sentidos: el deportivo y el humano.
Antic volvi¨® el 7 de mayo de 2000 al estadio Tartiere con el Atl¨¦tico al borde del precipicio. Enfrente estaba un Oviedo, con Luis Aragon¨¦s, que tambi¨¦n se jugaba lo suyo. El empate, 2-2, arroj¨® al equipo rojiblanco a la Segunda Divisi¨®n y abri¨® la puerta del despido a Antic aunque, en principio, se declarase dispuesto a trabajar gratis un a?o.
Con Jes¨²s Gil en su estado puro, Antic tuvo que buscar acomodo precisamente en el Oviedo, en el que todav¨ªa se recordaba el buen juego en su anterior etapa, con Jokanovic y Prosinecki en la sala de m¨¢quinas. La afici¨®n hasta le perdon¨® su espantada para irse al Atl¨¦tico. La afici¨®n confiaba en que lograr¨ªa contrarrestar la tendencia conservadora de los dirigentes con los fichajes. Pero aqu¨¦llos impusieron sus criterios y jugadores tan importantes como Bento, Pompei, el fallecido Dubovsky y Vald¨¦s no encontraron el relevo adecuado.
A mitad de temporada, en su deseo de dar un golpe de efecto, Antic apost¨® por el delantero Collymore, al que le bast¨® un mes para confirmar los pron¨®sticos m¨¢s pesimistas. El caso del ingl¨¦s y la ca¨ªda en picado del equipo le llevaron a expresar p¨²blicamente lo que nunca se call¨® en privado. Se quej¨® de la falta de calidad de la plantilla, que reaccion¨® con dureza y le oblig¨® a pedir disculpas.
Con su autoridad mermada, Antic cedi¨® incluso a sus principios t¨¢cticos y acept¨® acabar la campa?a con un 4-2-3-1. El equipo mejor¨® e incluso gan¨® al Barcelona en el Camp Nou, pero todo se torci¨®. En Mallorca, con Luis de nuevo como verdugo, Antic vivi¨® su segundo descenso a los infiernos. Tiene otro a?o de contrato, pero la mayor¨ªa apuesta por una salida similar a la que conoci¨® en el Atl¨¦tico. Con una diferencia: los dirigentes del Oviedo raramente pagan millonadas a alguien por no trabajar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.