Sociatas
En uno de los ¨²ltimos espacios de Las noticias del gui?ol, de Canal +, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero le propon¨ªa a un sorprendido Jes¨²s Caldera sustituir al Gobierno durante las vacaciones de verano. 'Pero, jefe, si nosotros somos la oposici¨®n, no podemos sustituir al Gobierno'. 'No importa', contestaba imperturbable el secretario general del PSOE, 'les hacemos un favor y adem¨¢s estamos tan compenetrados que no se notar¨¢ la diferencia'. En tono de caricatura los gui?oles han sabido retratar a un dirigente socialista que ya todo el mundo conoce por el apodo de Sosoman.
Moderaci¨®n, tranquilidad, permanente voluntad de pacto o ausencia de cr¨ªticas de fondo han dibujado el perfil plano del l¨ªder de la oposici¨®n. En su estrategia hacia el centro, Rodr¨ªguez Zapatero se asemeja m¨¢s a los liberales reformistas que a los herederos de la izquierda socialdem¨®crata. Signo de los tiempos quiz¨¢ cuando los pol¨ªticos carism¨¢ticos, para bien o para mal, han desaparecido de la escena.
En l¨ªnea con esta actitud la reciente Conferencia Pol¨ªtica del PSOE ha derivado en un conjunto de vaguedades, lugares comunes y buenos prop¨®sitos. Nada nuevo bajo el sol en un partido socialista que desde que abandon¨® el marxismo en 1979 no ha generado ni un m¨ªsero debate intelectual de cierta altura. Nada que ver con sus socios europeos que, como los franceses de Lionel Jospin o los alemanes de Gerhard Schr?der, han ensayado con m¨¢s o menos ¨¦xito f¨®rmulas nuevas. Sin ir m¨¢s lejos, la izquierda plural francesa, que engloba a socialistas, comunistas y ecologistas en el Gobierno, o la alianza rojiverde alemana. Medidas como la semana laboral de 35 horas en Francia o como la futura eliminaci¨®n de la energ¨ªa nuclear en Alemania representan avances indiscutibles de la izquierda. Entretanto, el PSOE parece m¨¢s preocupado por recuperar el poder a base de una receta ¨²nica de centrismo reformista que en oponer al PP una izquierda imaginativa y renovada.
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