Los seguidores de Manu Chao desbordan las pocas plazas de Bilbao
El concierto que el cantante Manu Chao ofrecer¨¢ el pr¨®ximo 22 de agosto en Bilbao, con motivo de la Aste Nagusia, trae de cabeza al Ayuntamiento de la ciudad desde hace semanas. Aunque hace meses que se prepara la que se considera la actuaci¨®n estrella de las fiestas, el antiguo l¨ªder de Mano Negra -que ha cientos de miles de copias de sus dos discos en solitario, Clandestino, publicado en 1998, y el que ahora presenta, Pr¨®xima estaci¨®n: esperanza, que se ha situado en los primeros puestos de las listas de ventas- no se lo est¨¢ poniendo f¨¢cil.
Chao, que dice tener una vinculaci¨®n especial con la ciudad, debido en parte a su madre bilba¨ªna, es un gran aficionado a las celebraciones de estas fiestas, hasta tal punto que, seg¨²n sus representantes, su actuaci¨®n en Bilbao es el ¨²nico capricho que ha pedido en la gira que emprende este verano por Espa?a y que le llevar¨¢ a finales de agosto a Orense, y en septiembre a Gij¨®n, Mallorca, Burjassot (Valencia), Fuenlabrada (Madrid), Barcelona y Zaragoza.
Ese capricho est¨¢ causando muchos problemas a los organizadores del concierto, que han calculado que unas 30.000 personas intentar¨¢n conseguir una plaza en un recinto, la Plaza del Gas, que s¨®lo tiene capacidad para acoger, como mucho, a 5.000 personas. Hace semanas, intentaron convencer al cantante para que aceptara actuar en un recinto m¨¢s amplio, pero Chao se neg¨® aduciendo que 'razones sentimentales' le unen a este emplazamiento, un anfiteatro natural situado a proximidad del Casco Viejo, en la que hace a?os actu¨® con su anterior grupo.
'Autorregulaci¨®n'
Ante su negativa, el Ayuntamiento se plante¨® en un principio distribuir 6.000 invitaciones para el concierto, pero el rechazo general a esta opci¨®n y el consejo de varios 'expertos' en este tipo de eventos convencieron al consistorio de que era m¨¢s conveniente que la entrada fuera libre hasta completar el aforo. Se optaba as¨ª por la 'autorregulaci¨®n del p¨²blico', en palabras de la responsable de Cultura, Marian Ega?a.
En cualquier caso, esta alternativa ser¨¢ apoyada por dotaciones policiales que evitar¨¢n disturbios en las previsibles colas, as¨ª como con la instalaci¨®n de vallas met¨¢licas en todo el per¨ªmetro de la plaza.
La apuesta es muy arriesgada si se tiene en cuenta la fidelidad de los seguidores de Chao, pero para aquellos que no consigan acceder al recinto, el Ayuntamiento habilitar¨¢ una o varias pantallas gigantes, -a¨²n no est¨¢ decidido- en otros puntos de la ciudad.
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