Un campe¨®n con mala imagen
Hewitt, ganador del Open de EE UU, es de los tenistas m¨¢s odiados del circuito
Brad Gilbert, el entrenador de Andre Agassi, no fue un modelo de comportamiento en su etapa como jugador. Sin embargo, no tuvo pelos en la lengua, hace alrededor de un a?o, al afirmar que no entend¨ªa c¨®mo todav¨ªa nadie le hab¨ªa partido la cara a Lleyton Hewitt. El campe¨®n del Open de Estados Unidos de tenis -gan¨® a Pete Sampras en la final por 7-6 (7-4), 6-1 y 6-1 en una hora y 54 minutos- tiene s¨®lo 20 a?os, pero le urge un cambio de imagen.
As¨ª se lo debi¨® aconsejar a Hewitt alg¨²n miembro de la compa?¨ªa Octagon, que se ocupa de sus intereses, porque en el torneo norteamericano comenz¨® un reciclaje de s¨ª mismo como m¨ªnimo sorprendente. El australiano tuvo un incidente en su partido de la segunda ronda contra el local James Blake cuando, se?alando al juez de l¨ªnea que le hab¨ªa cantando mala una bola, le dijo al ¨¢rbitro de silla: 'Mira a uno y otro. ?En qu¨¦ se parecen?'. Los dos son negros. ?l neg¨® cualquier intenci¨®n, pero fue acusado de racismo y abucheado por el p¨²blico.
El caso no pas¨® a mayores porque los responsables del torneo entendieron que fue un acto irreflexivo. Sin embargo, su agresiva actitud en la pista ha causado ya muchos problemas a Hewitt. Mantiene desde hace tiempo un litigio con ?lex Corretja porque el espa?ol se sinti¨® insultado en el Open de Australia de 2000, cuando, con 6-0, 6-0 y rozando el tercer 6-0, Hewitt segu¨ªa con sus t¨ªpicos 'come on!' ('?vamos!') y, levantando el brazo en su direcci¨®n, le dirig¨ªa miradas asesinas. En el Masters de Lisboa, a finales de ese a?o, Corretja explot¨®: 'Lo ¨²nico que he dicho de ¨¦l es que no me gusta su actitud porque es provocadora y ofensiva para sus rivales'.
Hewitt fue declarado el deportista m¨¢s odiado de 2000 por una prestigiosa revista australiana. No se habla con la prensa de su pa¨ªs desde que en enero de 2000 fue silbado con insistencia por el p¨²blico de Adelaida, su ciudad, porque lanz¨® con rabia al suelo su raqueta tras perder un punto. Entonces acus¨®: 'Esto demuestra la estupidez del p¨²blico australiano'.
Pero todos estos aspectos de su personalidad no diluyeron la calidad de su tenis ni enturbiaron su proyecci¨®n en el circuito. Hijo de Glynn, un ex jugador de f¨²tbol australiano que jug¨® en el Richmond, el Woodwille y el South Adelaida, y de Sherilyn, una buena jugadora de netball y actualmente entrenadora f¨ªsica, Lleyton jug¨® al f¨²tbol australiano hasta los 13 a?os. Y s¨®lo cuando el ex jugador Darren Cahill se cruz¨® en su camino decidi¨® dedicar sus esfuerzos al tenis. Su evoluci¨®n fue rapid¨ªsima, puesto que a los 15 a?os y 11 meses, en 1997, fue el tenista m¨¢s joven de la historia que super¨® la fase previa del Open de Australia. Era el 550? del mundo.
Un a?o despu¨¦s comenz¨® su explosi¨®n. Gan¨® en Adelaida, firm¨® un contrato de cinco a?os con Nike por 2.850 millones de pesetas, disput¨® las semifinales del Open norteamericano en 2000 y alcanz¨® la cuarta posici¨®n mundial esta temporada. 'He vivido algunos momentos dif¨ªciles en mi vida personal y en la ten¨ªstica', asegur¨® ayer tras ganar su primer t¨ªtulo del Grand Slam, 'pero debes pasar por todo eso para crecer y convertirte cada vez en una mejor persona dentro y fuera de la pista'.
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