Los socialistas abren su debate sobre la globalizaci¨®n

La tasa Tobin, que propone gravar las transacciones financieras y destinar su producto a desarrollar los pa¨ªses pobres, quiz¨¢ no sea en s¨ª misma una soluci¨®n a los graves desequilibrios econ¨®micos en el mundo actual, 'pero s¨ª es una buena propuesta' para adentrarse en el debate sobre la globalizaci¨®n y sus consecuencias. ?sta fue la posici¨®n de partida escogida ayer por el primer secretario del PSC, Jos¨¦ Montilla, para abrir la Escuela de Verano del PSC, que se celebra en La Seu d'Urgell y que los socialistas dedican este a?o a abordar el debate sobre la globalizaci¨®n.

Montilla adelant¨® las posiciones del PSC sobre este asunto. Elogi¨® la decisi¨®n del primer ministro franc¨¦s, Lionel Jospin, cuando sostuvo que la globalizaci¨®n 'ha de tener l¨ªmites' pero carece de sentido oponerse a ella. 'Tiene que existir tambi¨¦n una globalizaci¨®n social', dijo el primer secretario del PSC, para superar el estadio actual, en el que lo verdaderamente global es un inmenso mercado financiero mundial, pero no los derechos sociales de los trabajadores.

A la Escuela de Verano del PSC, que ha sido organizada por su secretario de formaci¨®n, Josep Borrell, se han apuntado un centenar de cuadros del partido. Hasta el domingo asistir¨¢n a ocho sesiones de debate introducidas por especialistas en diversos aspectos relacionados con la globalizaci¨®n.

Algo m¨¢s que un s¨ª o un no

Entre ellos figuran el que fue secretario de Estado de Comercio en uno de los gobiernos socialistas, Guillermo de la Dehesa; el presidente de Justicia y Paz, Arcadi Oliveras; los soci¨®logos Lu¨ªs Moreno y Javier Ramos; los economistas Vicen? Navarro y Philippe Fremaux, y dirigentes socialistas fuertemente implicados en estos debates, como el ex ministro Joan Maj¨®; el diputado y ex vicepresidente de la Comisi¨®n Europea Manuel Mar¨ªn; el presidente del grupo socialista en el Parlamento Europeo, Enrique Bar¨®n, y el tambi¨¦n eurodiputado Raimon Obiols, adem¨¢s del propio Borrell y el presidente del PSC, Pasqual Maragall.

El debate sobre la globalizaci¨®n preocupa a los socialistas tanto por lo que tiene de reto pol¨ªtico frente a sus posiciones tradicionales, que proceden de coyunturas anteriores al estadio actual de la globalizaci¨®n, como por la forma en que ha calado en la sociedad. El movimiento antiglobalizaci¨®n ha cuajado en sectores sobre todo juveniles y progresistas, en los que los socialistas aspiran a tener una presencia activa, pero en los que tienen muchas dificultades para incidir porque su tradici¨®n reformista y posibilista choca muy a menudo frontalmente con los planteamientos alternativos sobre los que se ha iniciado y lanzado el debate a escala mundial.

El PSC y el PSOE han apoyado en los ¨²ltimos meses propuestas como el establecimiento de la tasa Tobin, que es una de las banderas del movimiento antiglobalizaci¨®n, pero entre los socialistas no hay una posici¨®n un¨¢nime, ni en Espa?a ni en Europa.

En Catalu?a, la federaci¨®n barcelonesa del PSC adopt¨® en primavera varias resoluciones en favor de la tasa Tobin, y su principal dirigente, el diputado Joan Ferran, tiene presentada en el Parlament una propuesta para que la C¨¢mara la apoye. Pero como dijo ayer el primer secretario de la federaci¨®n leridana del PSC, el diputado Joaquim Llena, la creciente globalizaci¨®n 'ha trastocado nuestros esquemas' y muchos ciudadanos esperan de los socialistas algo m¨¢s consistente y elaborado que 'un debate tan primario como un s¨ª o un no a la globalizaci¨®n'.

Montilla acompa?¨® la incitaci¨®n al debate entre los socialistas sobre la globalizaci¨®n con una reafirmaci¨®n de las posiciones cl¨¢sicas. 'Los estados, ahora m¨¢s que nunca, han de ser correctores del mercado y los estados y las instituciones internacionales han de ser elementos estabilizadores de la globalizaci¨®n en todo el mundo', dijo.