El Gobierno abrir¨¢ una inspecci¨®n a las academias de ense?anza privadas

La Direcci¨®n de Consumo del Gobierno vasco est¨¢ preparando una campa?a de inspecci¨®n de los centros de ense?anza no reglada dada la sucesi¨®n de quejas que ha recibido de los ciudadanos. El comienzo de curso hace que este tipo de academias, como las de idiomas o inform¨¢tica, aumenten de una manera considerable su negocio. Sin embargo, las quejas contra estos centros han proliferado, sobre todo por la falta de claridad en el sistema de pago, las deficiencias en la prestaci¨®n del servicio y los t¨ªtulos que ofrecen, que en ocasiones inducen a error al usuario sobre su validez acad¨¦mica y profesional. El Ejecutivo considera que muchos centros imponen condiciones abusivas a sus clientes.

En septiembre comienzan el curso los peque?os y los mayores. La oferta de apoyo para estudiantes, las actividades extraescolares, ha hecho que proliferen el n¨²mero de centros de formaci¨®n no reglada. Pero no son s¨®lo los m¨¢s peque?os los que acuden a academias privadas, sino tambi¨¦n los adultos, que ven que el mercado les obliga a adaptar sus conocimientos. Consumo iniciar¨¢ una campa?a de control a finales de este mes o comienzos del pr¨®ximo.

Seg¨²n explica el director de Consumo, Rodrigo Garc¨ªa Azurmendi, la falta de transparencia en la informaci¨®n. En algunos casos, la imposici¨®n de condiciones il¨ªcitas y cl¨¢usulas abusivas obliga al Gobierno a un control de mercado en el que los inspectores van a revisar la informaci¨®n al p¨²blico, los folletos informativos, el propio contrato a entregar al cliente (que debe aclarar todo lo referente a precios, compromisos de pago y sistema de financiaci¨®n), las caracter¨ªsticas de los diplomas que se ofrecen y las facturas que se emiten.

174 reclamaciones

La Direcci¨®n de Consumo ha recibido en lo que va de a?o 174 reclamaciones por el mal funcionamiento de academias de idiomas, m¨²sica, inform¨¢tica y centros de educaci¨®n a distancia que preparan oposiciones o estudios profesionales que no son acad¨¦micos, entre otros establecimientos. De estas protestas, 17 proceden de ?lava, 70 de Vizcaya y 87 de Guip¨²zcoa. Garc¨ªa Azurmendi indic¨® a EL PA?S que 69 reclamaciones del total se resolver¨¢n a trav¨¦s de la v¨ªa arbitral, es decir, por medio de un sistema extrajudicial que sirve para resolver los desacuerdos que puedan surgir entre consumidores y vendedores.

Un 55% de las quejas se debe a falta de informaci¨®n o informaci¨®n encubierta, tanto en la publicidad como en los propios contratos que se formalizan con los usuarios. La falta de informaci¨®n est¨¢ relacionada, sobre todo, con el sistema de pago, que en mucho casos es a trav¨¦s de una entidad financiera. En la actualidad, est¨¢ proliferando esta modalidad, que consiste en que la academia ofrece al cliente la posibilidad de pagar el curso solicitando un cr¨¦dito a una entidad financiera con la que previamente ha llegado a un acuerdo.

Seg¨²n el director de Consumo, 'lo habitual es pagar el importe global a la academia, pero para darte la facilidad de no desembolsar el dinero de golpe te hablan de su financiera.' 'Sin embargo, en muchos casos no existe una entrega documental del contrato de cr¨¦dito suscrito con la financiera, por lo que el usuario lo desconoce. Luego se da el problema de que si la academia cierra, hay que seguir pagando a la financiera, como ha ocurrido y ha provocado numerosas reclamaciones', indica. Tambi¨¦n es motivo de reclamaci¨®n la publicidad enga?osa, porque los cursos no se ajustan a la informaci¨®n de los folletos ni a la que se ofrece en los medios de comunicaci¨®n.

Otro 26% de las quejas se refiere a deficiencias en la prestaci¨®n de servicios e incumplimientos de contrato. Sobre los t¨ªtulos prometidos tambi¨¦n hay reclamaciones. Muchos de los centros pueden tener autorizaci¨®n del Departamento de Educaci¨®n para funcionar porque simultanean la impartici¨®n de ense?anza reglada con otra que no lo es. Azurmendi advierte de que, a veces, la publicidad se?ala gen¨¦ricamente que el centro est¨¢ autorizado y el ciudadano cree que es para todas las ense?anzas, cuando no resulta as¨ª. En ese caso, una parte de los diplomas que ofrecen no tienen validez acad¨¦mica.

En el caso de que las denuncias afecten a una academia con sede en otra comunidad, el Gobierno avisa a esa autonom¨ªa para que act¨²e. Si el centro se halla en Euskadi, lo primero que hace la Direcci¨®n de Consumo cuando aprecia un incumplimiento es requerir a la academia para que subsane la deficiencia y si persiste la irregularidad, inicia un expediente.