Mohamed Atta recibi¨® dinero desde Pakist¨¢n en 2000

El FBI ha reconstruido la espina dorsal de la conspiraci¨®n. Varios elementos parecen claros: Bin Laden inspir¨® el complot hace dos a?os y un n¨²cleo de operativos lo prepar¨® en Alemania. Primero lleg¨® a EE UU una avanzadilla encabezada por los cuatro pilotos, y el resto se les uni¨® en los ¨²ltimos meses. Al menos cuatro de los 19 suicidas se entrenaron en Afganist¨¢n. Mohamed Atta recibi¨® dinero desde Pakist¨¢n y coordin¨® las finanzas y la operaci¨®n.

El egipcio Atta estableci¨® a mediados de 2000 la base de operaciones en el sur de Florida, donde tambi¨¦n vivieron y se entrenaron otros 14 de los 19 secuestradores. Desde aqu¨ª viaj¨® a distintos puntos de encuentro en California, Arizona, Nueva Jersey, Hamburgo, Praga y Madrid. ?l era el conducto del dinero. Ayer se dio a conocer que en el ¨²ltimo a?o los financiadores de los atentados le canalizaron desde Pakist¨¢n alrededor de 100.000 d¨®lares (unos 18 millones de pesetas).

Ese dinero fue ingresado en dos bancos de Florida. Atta sacaba efectivo y enviaba giros a los comandos establecidos en San Diego y varias ciudades al norte de Miami. Tambi¨¦n les sac¨® a algunos tarjetas de cajeros autom¨¢ticos para que pudieran usarlas directamente en caso necesario. En total, las autoridades de EE UU calculan que los atentados le costaron unos 90 millones de pesetas a los terroristas.

La mayor parte del dinero lo emplearon en alquilar coches, entrenarse en gimnasios, adquirir tel¨¦fonos m¨®viles, pagar clases de pilotaje o viajar dentro de EE UU para reunirse y ensayar los atentados. Por lo dem¨¢s, vivieron frugalmente, en hoteles o moteles de cuarta categor¨ªa o en apartamentos peque?os de zonas tur¨ªsticas. Nunca compraron ordenadores, usando en cambio las bibliotecas p¨²blicas para comunicarse por Internet.

Tres d¨ªas antes de los atentados devolvieron a su contacto en los Emiratos ?rabes los 15.000 d¨®lares que les hab¨ªan sobrado (alrededor de 275.000 pesetas). El contacto era Mustafah Ahmed Hawsawi, un hombre de negocios asociado a Bin Laden.

Financiaci¨®n

En el movimiento econ¨®mico es, sin embargo, donde se ha estancado la investigaci¨®n. El FBI ha rastreado el dinero hasta Arabia Saud¨ª, Emiratos ?rabes, Egipto, Pakist¨¢n, Yemen, Alemania e Inglaterra, pero no han logrado recomponer el andamiaje financiero y admiten que es una tarea extremadamente complicada. Saben, por ejemplo, que Bin Laden y otras organizaciones que supuestamente han participado en la conspiraci¨®n (especialmente la egipcia Jihad Isl¨¢mica dirigida por el brazo derecho de Bin Laden, Ayman al Zawahiri) usan un entramado de corporaciones, ONG, cuentas bancarias y tambi¨¦n el sistema hawala, que se basa en el trasiego de dinero de mano en mano a trav¨¦s de hombres de confianza.

En el diagrama que est¨¢ emergiendo de la conspiraci¨®n hay otras zonas oscuras, adem¨¢s de los fondos. Una es si ha existido o no patrocinio de gobiernos, en especial el de Irak. Tampoco est¨¢ claro qui¨¦n estaba detr¨¢s del apoyo log¨ªstico que recibieron desde Londres o los Emiratos ?rabes, ni las conexiones con la red argelina desarticulada en parte en Espa?a.

Hay m¨¢s de 500 detenidos s¨®lo en EE UU, pero ninguno ha sido imputado por los actos terroristas. El FBI busca ¨¢vidamente a otros 11 presuntos suicidas que tuvieron que abortar sus operaciones. El n¨²mero lo han deducido de conversaciones interceptadas a lugartenientes de Bin Laden en las que hablaban de 'los 30' que iban a bordo de los vuelos. Sospechan que tres de los arrestados -Zacharias Moussaoui, Jaweed Azmath y Ayub Al¨ª Khan- pertenec¨ªan a los otros dos supuestos comandos, pero ninguno est¨¢ cooperando.

Finalmente, los investigadores siguen pistas de posibles atentados alternativos con armas qu¨ªmicas o biol¨®gicas, pero s¨®lo han encontrado pruebas de que intentaron usar avionetas de fumigaci¨®n en Florida. Varios musulmanes detenidos por adquirir fraudulentamente licencias para conducir camiones con sustancias t¨®xicas no estaban supuestamente implicados con los suicidas.