El sector cer¨¢mico sufre los primeros s¨ªntomas de desaceleraci¨®n econ¨®mica

Nadie quiere hablar de crisis, pero los acontecimientos indican lo contrario. Los empresarios del sector de la cer¨¢mica y el azulejo hablan de 'coincidencias' o 'prudencia' cuando analizan hechos como la suspensi¨®n de pagos de una empresa con 125 trabajadores, Tilesa, o el cierre de un horno en firmas de la importancia de Tau. La rescisi¨®n de contratos eventuales se ha convertido casi en una norma a la vista de los vientos de desaceleraci¨®n econ¨®mica. EE UU lidera el ranking de destinos de la producci¨®n cer¨¢mica castellonense.

La velocidad de crucero con que avanzaba el sector azulejero deb¨ªa de frenarse en un momento u otro, y la incertidumbre sobre la situaci¨®n internacional ha adelantado la recesi¨®n. Pese a los intentos de restar importancia a la situaci¨®n, Cersaie, la feria internacional celebrada la pasada semana en Bolonia (Italia), ha confirmado los temores. Los datos apuntan a un descenso del 8% de los visitantes, cifra que el presidente de la patronal cer¨¢mica (Ascer), Fernando Diago, consider¨® positiva, ya que, 'la realidad ha mejorado las expectativas, que eran malas'. Los visitantes que m¨¢s han fallado en Cersaie han sido los estadounidenses y los ¨¢rabes. El caso es que EE UU lidera el r¨¢nking de destinos de la producci¨®n cer¨¢mica castellonense, mientras Arabia Saud¨ª se situaba en el quinto puesto e Israel en el octavo.

Si hasta la pasada semana la incertidumbre flotaba en los mercados, con el ataque de EE UU a Afganist¨¢n, las dudas s¨®lo han hecho que incrementarse. En el caso de las azulejeras coinciden dos factores: la tarea comercial en los mercados internacionales se ve dificultada porque nadie quiere coger tantos aviones como de costumbre y, en cuanto a los destinos de las ventas, el mercado se muestra prudente y est¨¢ retrasando las compras hasta que la situaci¨®n se aclare.

En f¨¢bricas donde la producci¨®n diaria puede llegar a ser de cientos de miles de metros cuadrados, la paralizaci¨®n de salidas de mercanc¨ªas provoca un incremento del stock nada deseable. En la mayor¨ªa de los casos se ha optado por seguir con la producci¨®n normal y aumentar el n¨²mero de metros cuadrados almacenados, lo que significa tambi¨¦n dinero almacenado. Sin embargo, en otros casos, como en la empresa Tau, se ha optado por 'aprovechar' el momento, cerrar un horno y actualizar una l¨ªnea. Seg¨²n fuentes de la empresa, se ha calibrado el stock con el que se cuenta, m¨¢s que suficiente para hacer frente a los posibles pedidos de los abastecedores, y se ha decidido, como medida de 'prudencia' proceder al cierre temporal de una de las l¨ªneas.

El caso de Tilesa viene de lejos. El pasado a?o ya present¨® una suspensi¨®n de pagos a la que hizo frente. Cuando la firma parec¨ªa recuperarse con la entrada, adem¨¢s, de un nuevo socio, en junio comenzaron los retrasos en el pago de las n¨®minas. Tras demorar el regreso de las vacaciones del 10 de septiembre al 1 de octubre, la empresa suspendi¨® pagos. Seg¨²n Atilano Escobar, de CC OO, el cierre 'no tiene nada que ver con la situaci¨®n'. Otro hecho que ha coincidido con los d¨ªas posteriores al ataque terrorista, el de la rescisi¨®n de contratos eventuales en muchas de las empresas, 'no es m¨¢s que una maniobra de los empresarios de cara a la negociaci¨®n del convenio, que empieza en enero', dicen los sindicatos.

El sector, que produce 621 millones de metros cuadrados (un 16% de la cuota mundial), exporta a 177 pa¨ªses, emplea 24.000 personas y factur¨® el a?o pasado 3.301 millones de euros (549.243 millones de pesetas).