'El arte tiene que vivir al margen de las preocupaciones sociales'

El t¨¦rmino minimalismo se ha incorporado ya al lenguaje cotidiano, asimilado a lo sobrio o a lo desnudo, a lo monocromo e incluso a lo peque?o. Este arquitecto brit¨¢nico, defensor del minimalismo arquitect¨®nico, ha pasado de dise?ar galer¨ªas y boutiques a proyectar un monasterio. Su obra se expondr¨¢ en el IVAM en junio de 2002.

Como ocurre con algunos t¨¦rminos de la historia del arte, la palabra minimalismo ha pasado de nombrar un movimiento a convertirse en adjetivo. De la misma manera que lo barroco y lo rococ¨® se convirtieron en voces sin¨®nimas de lo cargado y lo sobrecargado, lo minimal designa hoy aquello que es sobrio y contenido. John Pawson es, para muchos, el guru de la arquitectura minimalista. Autor del libro Minimum -que recoge en im¨¢genes su ideario est¨¦tico-, este brit¨¢nico asegura responder con su obra y su vida al concepto que desprecia lo irrelevante como camino para enfatizar lo importante. Su ropa, sus muebles y su estudio de Londres transmiten una aparente austeridad que ha llevado a Pawson a redise?ar no s¨®lo tiendas para Calvin Klein, galer¨ªas de arte, viviendas y hasta un monasterio cisterciense en la Rep¨²blica Checa -'llev¨¦ a los monjes a mi casa y me preguntaron si no ser¨ªa demasiado austero para ellos'-, sino tambi¨¦n mantas, mesas, bandejas y, ¨²ltimamente, un libro sobre cocina, tambi¨¦n minimalista, naturalmente.

PREGUNTA. Muchos edificios son hoy minimalistas y, sin embargo, muy pocos arquitectos admiten esa etiqueta.

RESPUESTA. A la gente le molesta las etiquetas porque todos tenemos conciencia de nuestra individualidad. La palabra ha cuajado en la cultura popular y, tal vez por eso, algunos se muestran reticentes ante ella. Los arquitectos aprenden de estructuras, de dise?o, pero no sienten, necesariamente, implicaciones emocionales con lo que est¨¢n haciendo. Para m¨ª, la arquitectura forma parte de las preguntas que me hago como individuo. En la vida trato de reducir las cosas, de simplificar, y lo mismo hago como arquitecto.

P. ?Si el minimalismo es esencialidad y reducci¨®n, se trata de algo nuevo o de algo que ha existido siempre?

R. Las dos cosas. Es nuevo porque vivimos en una sociedad muy nueva. Nunca hemos estado tan ocupados ni nos hemos movido tan deprisa ni hemos tenido tantas cosas. El artista Michael Landy hizo hace poco una obra en la que catalogaba todo, todo lo que ten¨ªa, desde los libros hasta los calcetines o las sillas, y lo destrozaba. Se deshizo de todas sus pertenencias, incluidos sus propios cuadros y su pasaporte. Ten¨ªa 7.004 cosas y se qued¨® sin nada.

P. ?Por qu¨¦?

R. Para explorar la dependencia de vivir en una sociedad de consumo, para tratar de entender lo que las cosas significan para nosotros. Para saber lo que es no tener nada. No quiero decir con eso que todos tengamos que pasar por esa fase, pero est¨¢ claro que tenemos demasiadas cosas. La mayor¨ªa de ellas innecesarias y algunas molestas. Hace cien a?os la gente no ten¨ªa 7.000 cosas, se viv¨ªa con 70.

P. ?Y se viv¨ªa mejor?

R. En muchos sentidos s¨ª.

P. ?No cree que Barrag¨¢n o Siza ya eran minimalistas antes de que se acu?ara el t¨¦rmino?

R. Sin duda comparten algunas de las caracter¨ªsticas, pero tambi¨¦n las compart¨ªa Mies van der Rohe. El minimalismo es una etiqueta que permite diferencias individuales. Yo trato de hacerlo todo de la manera m¨¢s sencilla posible. Tengo pocas posesiones y pocos amigos. Valoro m¨¢s la calidad que la cantidad y tener menos confiere libertad. Eso puede parecer contradictorio. Barrag¨¢n ten¨ªa mucho dinero, clientes ricos y una vida de abundancia.

P. ?Y usted no?

R. Yo la tuve, pero me deshice de ella. Se necesita dinero para muchas cosas: tener una oficina, comer, educar a tus hijos, pero se puede vivir sin nada m¨¢s que eso. En determinado momento de mi vida renunci¨¦ a mis posesiones para empezar de nuevo. Parad¨®jicamente, si uno tiene una educaci¨®n, familia y vocaci¨®n, el dinero termina por volver. Luego me cas¨¦, tuve hijos y volv¨ª a necesitar dinero. Es una cuesti¨®n de prioridades.

P. Para los minimalistas de hoy, ?qu¨¦ es m¨¢s importante, la herencia arquitect¨®nica del Movimiento Moderno o la de los artistas del minimalismo?

R. Siempre me he sentido m¨¢s inclinado hacia el arte que hacia la arquitectura. La inspiraci¨®n est¨¢ asociada al arte y tal vez los precedentes, a la arquitectura.

P. Al contrario del Movimiento Moderno, que defend¨ªa un ideario social -viviendas dignas para todos- con un resultado arquitect¨®nico concreto -geometr¨ªas sin ornamento, relaci¨®n entre interior y exterior del edificio-, el minimalismo parece carecer de ideolog¨ªa.

R. Se trata de un movimiento evidentemente elitista, pero en eso radica su fuerza. Poca gente puede tener un espacio minimalista, pero a la vez poca gente podr¨ªa vivir en un espacio as¨ª. En Inglaterra sabemos bastante de elitismo y de antielitismo. Se supon¨ªa que la c¨²pula del milenio que proyect¨® Richard Rogers iba a gustar a todo el mundo; pero no le gust¨® a nadie. Los arquitectos debemos hacer nuestro trabajo lo mejor posible y no preocuparnos por el mercado. Las cosas buenas terminan por gustar a todo el mundo. El arte tiene que vivir al margen de las preocupaciones sociales.

P. ?El minimalismo es el estilo de la falta de imaginaci¨®n?

R. Es muy dif¨ªcil hacer buena arquitectura minimalista. Cuando termino un proyecto por lo general no quiero que nada lo decore. La luz y la textura de un espacio pueden ser una obra de arte.

P. ?Al limitar un vocabulario arquitect¨®nico es m¨¢s f¨¢cil no cometer errores?

R. Es m¨¢s f¨¢cil ser discreto. Pero es m¨¢s dif¨ªcil no equivocarse ya que cualquier error resulta mucho m¨¢s visible.

P. ?Alguna vez ha sentido la tentaci¨®n de trabajar de otra manera, de utilizar el color, las curvas?

R. Me gusta mucho visitar otros edificios, y ver las casas de otras personas, tumbarme en sus sof¨¢s. En mi casa no tengo sof¨¢ porque ocupar¨ªa demasiado espacio y eso me molestar¨ªa.

P. Adem¨¢s de la falta de confort, los espacios minimalistas parecen carecer de memoria.

R. La comodidad no es s¨®lo un sof¨¢ mullido, la mala iluminaci¨®n puede resultar muy inc¨®moda. Si tienes expuesta la foto de tu madre y la ves cada d¨ªa, llega un momento en que dejas de verla. Si buscas la foto de tu madre cuando la recuerdas le dedicas m¨¢s atenci¨®n cuando la miras. El minimalismo es un poco eso: frente a vivir rodeado de retratos, elegir cu¨¢ndo quieres ver la foto de tu madre.