Una comunidad marginada
Los cristianos de Pakist¨¢n quedaron fuertemente impresionados por la agresi¨®n de ayer. Aunque se trata de una minor¨ªa marginada socialmente, nunca hasta ahora hab¨ªan sido objeto de un ataque tan grave. La regi¨®n donde se produjo es escenario habitual de enfrentamientos entre musulmanes sun¨ªes y shi¨ªes.
Se estima que 1.200 personas han perdido la vida en esa violencia intersectaria en los ¨²ltimos nueve a?os. Sin embargo, los cristianos hab¨ªan quedado al margen, a excepci¨®n de algunos incidentes aislados como el asesinato de una monja estadounidense en 1988 o los asaltos a iglesias de 1997. En aquella ocasi¨®n, extremistas isl¨¢micos saquearon 13 iglesias, una escuela cat¨®lica y varias casas de cristianos tras acusar a varios miembros de esa minor¨ªa de haber cometido blasfemia al arrojar p¨¢ginas arrancadas de un Cor¨¢n en una mezquita.
En 1986, para satisfacer a los integristas, el Gobierno de Mohamed Zia ul Haq convirti¨® la blasfemia contra el islam en un crimen castigado con la pena de muerte. Desde entonces, esa ley ha servido para intimidar a las minor¨ªas religiosas, y en especial a los cristianos.
Seg¨²n las organizaciones de derechos humanos, 2.500 personas est¨¢n encarceladas o acusadas de blasfemia. A pesar de los proyectos de Estado secular de su fundador, Mohamed Ali Jinnah, Pakist¨¢n naci¨®, como Israel, con vocaci¨®n de hogar para un grupo religioso concreto, en este caso los musulmanes de India. La llegada al poder de Zia ul Haq en 1977 supuso un giro radical a favor de la islamizaci¨®n del pa¨ªs.
Un 1,5% de los 140 millones de paquistan¨ªes son cristianos, la mayor¨ªa cat¨®licos, pero tambi¨¦n hay protestantes y seguidores de la Iglesia de Pakist¨¢n. Su origen se remonta a la ¨¦poca del Imperio Brit¨¢nico, cuando muchos intocables y otros marginados se convirtieron a la religi¨®n de los colonizadores con la esperanza de mejorar su futuro. Pero para la mayor¨ªa de los hind¨²es en India y de los musulmanes en Pakist¨¢n, siguen siendo el ¨²ltimo escal¨®n social.
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