El Deportivo consigue acabar primero de grupo

Con los deberes ya cumplidos, el Deportivo acudi¨® a las rebajas de Atenas sin demasiado inter¨¦s por adquirir el ¨²ltimo g¨¦nero a la venta. Ni siquiera recurriendo a los futbolistas m¨¢s hambrientos de oportunidades logr¨® Javier Irureta despertar al Deportivo para uno de esos duelos que congela los est¨ªmulos de los jugadores, ya sean titulares indiscutibles o gente como Djalminha y Makaay, que se desesperan f¨¢cilmente en el banquillo. El Depor encar¨® el partido con un ¨¢nimo burocr¨¢tico que no le impidi¨® ni conseguir el empate ni terminar primero de grupo.

La noticia era el regreso de Djalminha y, en ese aspecto, el partido no ayud¨® demasiado al brasile?o. De su ingenio no hay duda, como qued¨® patente en alguna acci¨®n aislada, una pared de espuela o un pase de extraordinaria precisi¨®n hacia el hueco por detr¨¢s de la defensa. Djalminha dio la asistencia del empate en un c¨®rner e incluso roz¨® el gol mediada la primera parte, cuando un primoroso lanzamiento suyo se top¨® con una magn¨ªfica estirada del meta griego. Pero ser¨ªa mucho pedir que el brasile?o justificase sus protestas con una exhibici¨®n en un duelo mortecino de principio a fin.

El Olypiakos puso m¨¢s entusiasmo, porque en el reparto de la pedrea a¨²n le pod¨ªa tocar la Copa de la UEFA, un buen premio de consolaci¨®n para un equipo de f¨²tbol muy limitado. A los griegos les bast¨® una arrancada de su mejor jugador, Djordjevic, para capturar un gol poco despu¨¦s del descanso, tras una primera parte que s¨®lo invit¨® a la modorra. El Deportivo reaccion¨® y empat¨®. Termina as¨ª una primera ronda brillante.