Un cl¨¢sico de lo vasco
La importancia pol¨ªtica y social de la cuesti¨®n vasca en los tres ¨²ltimos decenios ha contribuido a la eclosi¨®n de estudios historiogr¨¢ficos sobre temas vascos, en especial el nacionalismo, de valor desigual. Recientemente, la grave situaci¨®n de Euskadi ha dado lugar a que rebrote una historiograf¨ªa ad probandum, tanto nacionalista como antinacionalista, que recuerda ¨¦pocas pret¨¦ritas, felizmente superadas, como el franquismo y el exilio, cuando la historia era un arma pol¨ªtica m¨¢s y no exist¨ªa una historiograf¨ªa vasca cient¨ªfica sobre la edad contempor¨¢nea. ?sta surgi¨® con el final de la dictadura y el inicio de la transici¨®n, d¨¢ndose un salto cualitativo entre 1974 y 1979 por la publicaci¨®n de una serie de obras fundamentales sobre la historia del Pa¨ªs Vasco desde la crisis del Antiguo R¨¦gimen hasta la Restauraci¨®n. Varias de ellas se dedicaron a analizar los or¨ªgenes y primeros pasos del movimiento nacionalista a finales del siglo XIX de la mano de Sabino Arana (1865-1903), el fundador del PNV en Bilbao en 1895.
LA PATRIA DE LOS VASCOS
Javier Corcuera Taurus Madrid, 2001 640 p¨¢ginas. 3.200 pesetas
La culminaci¨®n de esta primera fase de la nueva historiograf¨ªa vasca fue el libro de Javier Corcuera, Or¨ªgenes, ideolog¨ªa y organizaci¨®n del nacionalismo vasco (Siglo XXI, Madrid, 1979), que acaba de ser reeditado con el t¨ªtulo La patria de los vascos. Su aparici¨®n coincidi¨® con la entrada en vigor del Estatuto de Gernika. Para dicha historiograf¨ªa, los a?os ochenta representaron una nueva fase, caracterizada por su crecimiento y su institucionalizaci¨®n en las universidades. Los historiadores que empezamos entonces a investigar sobre el nacionalismo vasco, aun centr¨¢ndonos en periodos posteriores, tuvimos en el libro de Corcuera la obra de referencia obligada no s¨®lo para conocer su nacimiento, sino tambi¨¦n para disponer de claves necesarias para entender su evoluci¨®n en el siglo XX.
Al cabo de m¨¢s de dos d¨¦cadas, la historiograf¨ªa ha avanzado considerablemente en el conocimiento riguroso de las distintas etapas por las que ha atravesado dicho movimiento desde su g¨¦nesis en el siglo XIX hasta la transici¨®n. De ah¨ª que ya no sea suficiente con los trabajos pioneros de los a?os setenta, con la ¨²nica excepci¨®n de la etapa fundacional de Sabino Arana, para la cual contin¨²a siendo imprescindible el documentado libro de Corcuera, pues no ha sido superado por ning¨²n otro.
Se trata de un completo estudio sobre el primer nacionalismo vasco, situado en el marco de las profundas transformaciones econ¨®micas, sociales y pol¨ªticas que provoc¨® la revoluci¨®n industrial de Vizcaya en el ¨²ltimo cuarto del siglo XIX. Con respecto a este contexto y a los antecedentes hist¨®ricos (fuerismo, carlismo, literatura rom¨¢ntica...), s¨ª ha habido progresos relevantes en la historiograf¨ªa posterior. Esto ha obligado al autor en la nueva versi¨®n de su obra a actualizar en parte la bibliograf¨ªa, a ofrecer una visi¨®n menos economicista y a cambiar la terminolog¨ªa para denominar las fracciones de la burgues¨ªa vizca¨ªna. En cambio, sigue siendo plenamente v¨¢lido el n¨²cleo central de su investigaci¨®n sobre la ideolog¨ªa y la acci¨®n pol¨ªtica de Sabino Arana a trav¨¦s de tres etapas: 1893-1898 (radicalismo antiespa?ol), 1898-1902 (evoluci¨®n industrialista) y 1902-1903 (evoluci¨®n espa?olista). Asimismo, resulta fundamental su an¨¢lisis del grupo fuerista de Ram¨®n de la Sota, que ingresa en el PNV en 1898, para comprender el giro hacia la moderaci¨®n y el pragmatismo en la actuaci¨®n de Arana a partir de ese a?o y para desentra?ar su pol¨¦mica evoluci¨®n espa?olista del ¨²ltimo a?o de su vida. Sobre ella, la interpretaci¨®n de Corcuera contin¨²a siendo la m¨¢s fundada y convincente.
Aunque el profesor Corcuera ha realizado otras aportaciones de inter¨¦s, en particular su obra Pol¨ªtica y derecho. La construcci¨®n de la autonom¨ªa vasca (1991), para la historiograf¨ªa siempre quedar¨¢ su libro sobre los or¨ªgenes del nacionalismo vasco como una obra capital, a mi juicio la mejor existente acerca de la historia de ese movimiento en general. Teniendo en cuenta que el aranismo subsiste a¨²n, para entender el nacionalismo vasco de nuestros d¨ªas es preciso conocer bien a su padre fundador, y para ello nada mejor que la lectura de este libro ya cl¨¢sico de Javier Corcuera, cuya val¨ªa extraordinaria corrobora tanto esta reedici¨®n renovada como su pr¨®xima traducci¨®n al ingl¨¦s por la Universidad de Nevada Reno (Estados Unidos). Como escribi¨® Manuel Tu?¨®n de Lara en su pr¨®logo de 1979, 'tal vez Javier Corcuera haya acertado a desvelar con su an¨¢lisis de historiador y politista los or¨ªgenes de uno de los mayores dramas colectivos de nuestro tiempo'.
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