Profusi¨®n de g¨¦neros y estilos desde el Renacimiento
En estos d¨ªas navide?os, la vida musical madrile?a registra un crecimiento extremado: se multiplican los oratorios, las fiestas de villancicos, las programaciones ligeras de peso y ricas de contraste, pero tambi¨¦n podemos asistir a audiciones de especial valor e indudable importancia; as¨ª contin¨²a el ciclo de c¨¢mara de Brahms en la serie Liceo de C¨¢mara (Caja Madrid), con el Tr¨ªo Altenberg; se dan cita distintos grupos atentos a la contemporaneidad: Satory Camara, de estilo y calidad garantizados por el buen hacer del director Aguirre en obras de Jacinto, Cruz, Vadillo y Pons; Plural Ensamble, la formaci¨®n de Fabi¨¢n Panisello, int¨¦rprete de Carter, Ligeti, Luis de Pablo, Rueda y el propio Panisello; el Sax Ensamble, que sum¨® al nombre de Sof¨ªa Gubaidulina los espa?oles de Rueda, Nieto y Garc¨ªa Rom¨¢n.
Dentro del campo extenso del repertorio pret¨¦rito, en pocos d¨ªas hemos acumulado el barroco italiano, alem¨¢n y franc¨¦s del Grupo Zarabanda, de ?lvaro Mar¨ªas, que ofreci¨® a Juventudes Musicales una de sus mejores consecuciones; los conjuntos vocal e instrumental de John Eliot Gardiner que profundizaron en la obra de Juan Sebasti¨¢n Bach ante los seguidores del ciclo Complutense y The Sixteen Symphony of Harmony and Invention, de Harry Christophers, con la primera versi¨®n de El Mes¨ªas, de H?ndel, a la que siguieron las de Kornev con la Sinf¨®nica y Coro de San Petersburgo y la de Afrian Davis al frente de The Chiltern Chamber Orchestra and Choir.
Como es caracter¨ªstico en la actividad de Jos¨¦ Ram¨®n Encinar, deben se?alarse con piedra blanca las interpretaciones de El Diluvio, de Stravinski; el Concierto para viol¨ªn, de David del Puerto, y la reaparici¨®n del nombre de Jaume Pahissa con Tres villancicos catalanes, en los ciclos de la Comunidad de Madrid, su Coro y Orquesta.
La 'Novena'
Desde que se hizo cargo de la Orquesta Nacional, en 1962 y hasta 1978, Rafael Fr¨¹hbeck de Burgos estableci¨®, como uso europeo, la audici¨®n de la Novena Sinfon¨ªa, de Beethoven, cuando finaliza el a?o, pr¨¢ctica continuada por el maestro desde su designaci¨®n como Em¨¦rito de la OCNE.
En un concierto extraordinario, a taquilla abierta, tuvimos el viernes la Novena, de Fr¨¹beck, y en verdad que puede hablarse de tal modo cuando, al cabo del tiempo y el an¨¢lisis, el grande y trascendente himno sobre los versos de Schiller adquiere sello particular en la concepci¨®n de cada batuta significativa como es la de Fr¨¹hbeck.
Anotemos el ¨¦xito y la excelent¨ªsima labor de la ONE y el Coro Nacional, cuidado por Steubing-Nagenborg, y los m¨¦ritos de los solistas vocales Eva Johanson, de Dinamarca; Mar¨ªa Jos¨¦ Su¨¢rez, de Oviedo; Endrich Wottrick, de Alemania, y Johan Tilli, de Finlandia.
Lleno absoluto y triunfo aclamatorio.
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