SIN MEN?S PARA LOS POL?TICOS

Un mes despu¨¦s de la primera de las manifestaciones populares conocidas como cacerolazos, que forzaron los radicales cambios en el Gobierno argentino, la iniciativa popular muestra imaginativos rechazos a la clase pol¨ªtica del pa¨ªs. Un ejemplo es lo que ocurre en el restaurante La Marchigiana, un tradicional y bastante concurrido local de la ciudad de Mendoza en el que los pol¨ªticos no son bienvenidos. 'Nosotros decidimos con todo el equipo de trabajo del restaurante no atender m¨¢s a pol¨ªticos y funcionarios p¨²blicos hasta que vuelvan a pagar los subsidios de comedores [infantiles] comunitarios', ha se?alado su due?o, Fernando Barbera, seg¨²n el servicio de noticias de la BBC brit¨¢nica. Como era de esperar, el rechazo del restaurante no ha sido bien recibido por los pol¨ªticos locales. Dice tambi¨¦n Barbera que hasta la fecha no se ha visto obligado a mostrarle la puerta de salida a ning¨²n pol¨ªtico, pero agrega que en algunos bares del centro de la ciudad la gente los ha hecho levantar e irse. Iniciativas gastron¨®micas similares o de alg¨²n modo parecidas se han visto tambi¨¦n en Espa?a. Comentaba recientemente Rafael Manzano, El B¨²ho, en un programa de la cadena SER su sorpresa cuando en un bar de Ciudad Real vend¨ªan bocadillos de chorizo a los que llamaban gescarteras.-