La guerrilla quiere legalizar el 'impuesto revolucionario' en Colombia
Las FARC consideran la posibilidad de poner fin a los secuestros
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) estudiar¨ªan suprimir los secuestros si el Gobierno legaliza la Ley 002, emitida por esa guerrilla el 25 de abril de 2000, que liga el pago de impuestos a las fortunas superiores al mill¨®n de d¨®lares. 'Es alucinante', reaccion¨® un observador. Los dirigentes rebeldes Andr¨¦s Par¨ªs y Sim¨®n Trinidad, que admitieron la existencia de empresas y personas que cumplen con la extorsi¨®n, justificaron su pretensi¨®n: se necesitan fondos para promover los cambios requeridos por Colombia.
Los dos mandos rebeldes declararon a un noticiero de televisi¨®n que la consecuci¨®n de la tregua, cuya negociaci¨®n se reanuda hoy, no debe abordarse con plazos fijos. La firma de una tregua antes del 7 de abril, incluyendo un alto el fuego y el cese de hostilidades, o sea de los secuestros, extorsiones y ataques brutales e indiscriminados, es el principal objetivo del acuerdo suscrito este domingo en la localidad de Los Pozos, a 800 kil¨®metros de Bogot¨¢, por el Gobierno y la guerrilla m¨¢s poderosa y antigua del continente.
Las declaraciones de los dos mandos insurgentes, posteriores al acuerdo, confirman la inconveniencia de entusiasmarse con el calendario de reuniones hacia la tregua, susceptible de fructificar o acabar como el rosario de la aurora. El eventual alto el fuego ser¨ªa el primero desde el conseguido en 1984, durante el Gobierno de Belisario Betancur.
La conclusi¨®n del plazo dado para conseguir la tregua coincidir¨¢ con las v¨ªsperas de las presidenciales de mayo y, previsiblemente, cualquier decisi¨®n al respecto, y sobre la pr¨®rroga de la zona de distensi¨®n bajo control rebelde, cuya vigencia finaliza el 10 de abril, estar¨¢ determinada en parte por esas elecciones y los discursos e intenciones de los candidatos.
El proceso de paz de hace tres a?os comenz¨® al calor de la campa?a de 1998, a?o en que el opositor y conservador Andr¨¦s Pastrana se acerc¨® al jefe de las FARC, Manuel Marulanda, Tirofijo, y atrajo las esperanzas de paz y el voto los electores. Pastrana cedi¨® entonces m¨¢s de la cuenta para asegurar su triunfo, seg¨²n ?lvaro Uribe, el candidato liberal independiente, contrario a la cesi¨®n de 42.000 kil¨®metros cuadrados a la guerrilla en el Cagu¨¢n. Es probable que, con las variantes impuestas por las nuevas circunstancias, las FARC intenten influir de nuevo.
Independientemente de las dificultades hacia la tregua, su hipot¨¦tica aplicaci¨®n ser¨ªa complicada, cuando no imposible, seg¨²n la mayor¨ªa de los analistas, si es bilateral y quedan al margen del compromiso los dem¨¢s actores de la violencia: el Ejercito de Liberaci¨®n Nacional (ELN), otros dos grup¨²sculos guerrilleros y los paramilitares.
'Actores armados'
?se es el criterio de Augusto Ram¨ªrez Ocampo, veterano negociador en los procesos de paz nacionales y de Am¨¦rica Central, dos veces ministro y canciller con Betancur: 'Deben estar todos los actores armados'. Con la informaci¨®n disponible, la meta parece imposible porque, entre otros factores, las FARC se levantar¨ªan de la mesa de aceptarse en ella la inclusi¨®n de los paramilitares que les combaten a muerte con 8.000 hombres y armamento moderno.
Hacer una cruel contabilidad de qu¨¦ fechor¨ªas han sido peores, si las de la guerrilla o las de los paramilitares, eso resultar¨ªa terrible', agrega Ram¨ªrez Ocampo en su despacho de Bogot¨¢. '?Qui¨¦n ha hecho m¨¢s secuestros, m¨¢s matanzas, quien cultiva m¨¢s coca? Uno tiene la impresi¨®n de que la guerrilla tambi¨¦n ha convertido la actividad en un modus vivendi'.
El ex ministro se?ala que las FARC protegen la zona de distensi¨®n porque, entre otros beneficios, protegen 15.000 hect¨¢reas de coca y 33 aeropuertos clandestinos, utilizados para transportar coca¨ªna y armas. El 75% de los ingresos de los paramilitares procede del narcotr¨¢fico. 'Que entre el diablo y escoja'.
El acuerdo humanitario, la conclusi¨®n de los secuestros o los ataques a la poblaci¨®n civil, no es f¨¢cil pero s¨ª lo m¨¢s factible en las actuales circunstancias. El Derecho Internacional Humanitario y los correspondientes protocolos de Ginebra se?alan el camino: obligan, al ser de derecho imperativo, a terminar con los secuestros, las extorsiones, los atentados contra obras civiles y a respetar la vida de los vencidos y de los heridos.
La tregua tambi¨¦n deber¨ªa ser multilateral para ser efectiva, porque es impensable, seg¨²n las fuentes consultadas, un acuartelamiento del Ej¨¦rcito, con 140.000 hombres, y de los 17.000 efectivos de la guerrilla de las FARC, mientras contin¨²an activos los hombres del ELN, los escuadrones paramilitares, o las bandas del narcotr¨¢fico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.