Catorce detenidos por adulterar grasas para piensos con aceites cancer¨ªgenos
Los implicados comercializaron al menos 5.000 toneladas de la mezcla
La Guardia Civil ha desarticulado una red de distribuci¨®n de grasas industriales que, mezcladas con grasas vegetales, se vend¨ªan a f¨¢bricas de pienso para consumo animal, introduciendo as¨ª sustancias cancer¨ªgenas en la cadena alimentaria destinada al consumo humano.
La investigaci¨®n del Servicio de Protecci¨®n a la Naturaleza (Seprona) y la fiscal¨ªa de Reus (Tarragona) se inici¨® hace seis meses a instancias de la Comisi¨®n Europea, que alert¨® del alto nivel de exportaci¨®n de grasas industriales procedentes de Holanda a empresas de Tarragona. La operaci¨®n se ha saldado con siete detenidos en Tarragona, dos en Lleida, cinco en Barcelona -a los que se acusa de haber comercializado al menos 5.000 toneladas de grasa adulterada- y un imputado en Girona.
Fuentes de la Guardia Civil apuntaron que el caso es similar a la manipulaci¨®n que provoc¨® el s¨ªndrome del aceite de colza desnaturalizado en la d¨¦cada de los setenta. Entonces las grasas desnaturalizadas se vendieron como aceite para el consumo humano.
La Direcci¨®n General de Sanidad y Protecci¨®n de Consumidores de la Comisi¨®n Europea, a instancias de la Fiscal¨ªa de Reus (Tarragona), puso en conocimiento de la Guardia Civil la existencia de una empresa ubicada en Holanda que exportaba a Espa?a productos qu¨ªmicos dedicados a la elaboraci¨®n de jab¨®n, que podr¨ªan estar siendo utilizados con otros fines.
Acusaciones
Los detenidos est¨¢n acusados de haber atentado contra la salud p¨²blica al comercializar al menos 5.000 toneladas de grasa destinada a la producci¨®n de piensos que habr¨ªa sido previamente adulterada con aceite procedente de procesos industriales. La grasa adulterada podr¨ªa haber alcanzado un valor de 1,8 millones de euros (unos 300 millones de pesetas). La mayor¨ªa del producto se comercializ¨® durante el a?o pasado, mientras que el resto, por orden judicial, se destin¨® a uso industrial ya l¨ªcito, seg¨²n inform¨® ayer la subdelegaci¨®n de Gobierno en Tarragona.
De las 15 empresas distribuidoras investigadas, siete son de la provincia de Tarragona y est¨¢n en la capital, Montroig del Camp, Constant¨ª, Reus y Salou. Estas empresas distribuyeron las grasas adulteradas a otras nueve, fabricantes de piensos. El Seprona no descarta m¨¢s detenciones.
El uso de grasas industriales para pienso animal est¨¢ totalmente prohibido. El aceite oxidado, seg¨²n explic¨® ayer el presidente del colegio de veterinarios de Tarragona, ?ngel Guerrero, forma compuestos arom¨¢ticos considerados cancer¨ªgenos que se acumulan en los tejidos adiposos del animal, desde donde pueden pasar a los consumidores que adquieran su carne.
Guerrero explic¨® que las 5.000 toneladas de grasa adulterada comercializada no constituyen una cantidad muy elevada, 'dependiendo, eso s¨ª, de las dosis y la mezcla', teniendo en cuenta que una explotaci¨®n ganadera puede consumir alrededor de 2.000 o 3.000 toneladas de pienso al a?o. El problema estribar¨ªa en que el producto hubiera llegado a una ¨²nica granja, pero no parece ser el caso. El presidente record¨® que desde el colegio de veterinarios ya se viene criticando la permisividad de las administraciones para con las empresas, 'a las que se reclama que se autocontrolen, lo que deja la puerta abierta a que el que quiera pueda hacer estragos, etiquetando como si el producto fuera correcto hasta que lo pillen'. 'Hace a?os que venimos diciendo que los veterinarios tienen que salir de los despachos y patearse las granjas. Todo se basa en el autocontrol y eso en un libre mercado es preocupante. Hay que revisar el modelo de inspecci¨®n', a?adi¨®.
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