El momento dulce de Alicia Keys

Las noticias de la industria musical estadounidense hablan del extraordinario resurgir comercial del rock duro, con ventas multimillonarias para grupos como Creed y Linkin Park. Sin embargo, la historia ejemplar de los ¨²ltimos meses es el impacto descomunal de la cantante, pianista y compositora Alicia Keys (Nueva York, 1981), que estuvo a punto de perderse debido a la obsesi¨®n por la comercialidad. Era menor de edad cuando firm¨® con Sony, compa?¨ªa que err¨® al intentar encajarla en el sonido de productores de moda. Clive Davis, el hist¨®rico disquero que fich¨® a Janis Joplin o Whitney Houston, compr¨® el contrato para su propio sello, J Records, y le concedi¨® la libertad necesaria para hacer a su gusto Songs in A minor. Una audacia recompensada: el disco est¨¢ siendo enorme ¨¦xito en todo el mundo.

Alicia Keys tuvo que hacer concesiones menores: el disco se iba a titular Soul stories in A minor, pero los gur¨²s de la mercadotecnia determinaron que la palabra soul pod¨ªa limitar su atractivo. 'No lo entiendo', asegura, 'ya que el soul fue realmente una m¨²sica que gustaba a todas las razas y a todas las naciones. Yo quer¨ªa conectarme espiritualmente con los grandes de los setenta, de Marvin Gaye a Stevie Wonder, que son modelos insuperables de innovaci¨®n musical y conciencia social'. Pertenece Alicia a la minor¨ªa estadounidense que tiene graves reservas respecto a la pol¨ªtica, interior y exterior, de su pa¨ªs. Y debe morderse la lengua cuando los compromisos de una artista en ascenso obligan a participar en actos p¨²blicos donde es obligada la pose de patriota sin fisuras. 'El ser hija de blanca y negro me ha ense?ado que hay muchas realidades que no encajan en la verdad oficial. He le¨ªdo mucho sobre los Panteras Negras y s¨¦ que ellos se identificaban con movimientos revolucionarios de otros pa¨ªses. Se equivocaron en sus t¨¢cticas, pero eran gente informada, muy consciente del dolor que Estados Unidos causaba en el Tercer Mundo. No me gusta que mi ciudad sea atacada, desde luego, aunque me parece inconcebible que tantos compatriotas m¨ªos no sepan las razones del odio que despertamos'.

Frente a esas palabras, conviene recordar que las canciones de Alicia se centran en el asunto amoroso. 'Es que yo no quiero cantar discursos pol¨ªticos. Puedo hablar de estos temas, pero, de momento, no se traducen en canciones. Estoy educ¨¢ndome pol¨ªticamente y quiero hacer discos organizados conceptualmente, con mayor densidad en los textos. De todos modos, mis compa?eros de viaje han sido Chopin, Beethoven, Marvin, Stevie, Donny Aretha, Roberta. Ellos tienen prioridad'.

Alicia Keys, que recientemente visit¨® Espa?a y realiz¨® actuaciones promocionales con su teclado y sus coristas, est¨¢ de gira por Estados Unidos con su banda completa de 13 miembros. Aunque la cita m¨¢s importante es el pr¨®ximo d¨ªa 27, cuando se fallan en Los ?ngeles los premios Grammy, en su 44? edici¨®n. Ella tiene seis candidaturas y compite en muchas con otra artista similar, la cantautora India Arie, que vende menos, pero ha conseguido siete candidaturas con otro debut de t¨ªtulo revelador, Acoustic soul.