Impotencia e incompetencia
Los desmanes acaecidos a ra¨ªz de las manifestaciones fascistoides del s¨¢bado pasado en el barrio valenciano de Russafa, as¨ª como la informaci¨®n que propici¨®, podr¨ªan haber nutrido la cr¨®nica anticipada de una fatalidad. As¨ª de previsibles eran, incluso para el m¨¢s desprevenido u obtuso de los responsables gubernativos. Como no es justo pensar que los tales sean tan ceporros, y mucho menos que fueran c¨®mplices de los altercados, nos ser¨¢ autorizado suponer que, sencillamente, son impotentes para afrontar estos desaf¨ªos a la democracia y aflicciones a los vecindarios agredidos por los extremistas de una y otra obediencia.
Alega la delegada del Gobierno en la Comunidad, Carmen Mas, y con ella m¨¢s altas instancias de su propia cuerda pol¨ªtica, que, con la ley en la mano, nada pod¨ªa hacerse para impedir que ese colectivo denominado Espa?a 2000 (A. de J.) saliese a la calle. Tienen sus derechos, y sus correspondientes limitaciones. Entre ellas, la de no insultar o provocar al vecindario mediante sus gritos y lemas xen¨®fobos, que debieron ser atajados al primer brote, siendo as¨ª que no eran legi¨®n, ni estaban en condiciones de actuar con violencia, excepci¨®n hecha de la que por s¨ª misma comporta su anacr¨®nica e inquietante presencia. Puestos a ser legalmente estrictos amparando esta mascarada, habr¨ªa de serlo con todas sus consecuencias.
De otro lado, no se comprende la torpeza e imprevisi¨®n gubernativa con respecto a los grupos de contramanifestantes. Por lo pronto, este episodio delata la escasa informaci¨®n que la polic¨ªa ten¨ªa de cuanto se coc¨ªa o, lo que es asimismo lamentable, la equivocada valoraci¨®n de sus noticias. Pero a¨²n en el caso de que se esperase la comparecencia de estos dem¨®cratas belicosos, no se comprende que se les tolerase exhibirse con caretas y antifaces premonitorios de los desmanes que urd¨ªan. Otro alarde de tolerancia, que no de respeto a la legalidad. Un individuo que esconde su careto, que no sus intenciones, ha de ser neutralizado en estas circunstancias antes de que se desmelene.
A mayor abundamiento, y como se desprende de no pocos indicios, esta muchachada hirsuta, aprovech¨® el desfile de los xen¨®fobos pirados para hacer sus pinitos con vistas a la cumbre mediterr¨¢nea que se celebrar¨¢ en esta ciudad en abril pr¨®ximo. De confirmarse esta posibilidad, las conclusiones son obvias: mucho tendr¨¢n que mejorar las previsiones y recursos de los responsables del orden -empezando por familiarizarse con el campo de batalla, esto es, las calles y barrios de la ciudad, que ignoran- y, al mismo tiempo, algo y mucho habr¨¢ de hacer el leg¨ªtimo frente antiglobalizaci¨®n para que no se le confunda con estos indeseables compa?eros de viaje a fin de no enajenarse el favor de la opini¨®n p¨²blica, cuyo arropamiento s¨ª necesita.
Y por ¨²ltimo, y a prop¨®sito de estos sucesos, ?por qu¨¦ se aflige de este modo a un barrio, como Russafa, dejado de la mano de Dios -que es como decir de la alcaldesa Rita Barber¨¢- en lo que concierne a servicios y equipamiento? Adem¨¢s del abandono en que se le tiene y sus representantes vecinales denuncian, ha de sentir y siente el rej¨®n de estos episodios urdidos por gentes ajenas y tronadas, agravados por la tolerancia mal entendida y la incompetencia constatada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Carmen Mas
- Manifestaciones
- Opini¨®n
- Russafa
- Valencia
- Ayuntamientos
- Orden p¨²blico
- Delegados Gobierno
- Protestas sociales
- Comunidades aut¨®nomas
- Seguridad ciudadana
- Malestar social
- Ultraderecha
- Comunidad Valenciana
- Subdelegaciones del Gobierno
- Administraci¨®n local
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Ideolog¨ªas
- Problemas sociales
- Administraci¨®n Estado
- Espa?a
- Administraci¨®n p¨²blica
- Pol¨ªtica
- Justicia
- Sociedad