Los soldados estadounidenses cayeron en una emboscada

La batalla de Shahi-Kot es el cap¨ªtulo m¨¢s importante de la guerra de Afganist¨¢n. Es el m¨¢s violento y el m¨¢s definitivo, porque de su resultado depender¨¢n la evoluci¨®n y el desenlace del conflicto. Las tropas de EE UU necesitan vencer sin muchas m¨¢s bajas; de lo contrario, los restos del r¨¦gimen talib¨¢n y Al Qaeda se sentir¨¢n animados a crear nuevos focos de resistencia para alargar la campa?a y agotar a su poderoso enemigo. Shahi-Kot es tambi¨¦n el cap¨ªtulo m¨¢s fantasmag¨®rico y el m¨¢s comprometedor para los servicios de informaci¨®n del Pent¨¢gono. La versi¨®n que se ofrece en Washington suele ser bastante distinta a la que proporcionan los mandos estadounidenses cerca del campo de batalla.

Por primera vez en la historia, una acci¨®n b¨¦lica de envergadura, con al menos 2.000 soldados en un bando y al menos 1.000 en el otro, est¨¢ siendo filmada por completo. El ¨¢rea de combate, de unos 10 kil¨®metros cuadrados, es captada continuamente por el ojo electr¨®nico de los aviones teledirigidos Predator. El general Tommy Franks, que dirige la guerra desde su base en Florida, puede seguir paso a paso los acontecimientos, y admite que debe contenerse para no inmiscuirse en las operaciones cotidianas, al mando del general Frank Hagenbeck. Y, sin embargo, nada est¨¢ claro. 'Las im¨¢genes no son la verdad; he hablado con tres o cuatro personas que han visto el v¨ªdeo, y todas me han ofrecido versiones distintas', dijo ayer Franks.

El v¨ªdeo al que se refer¨ªa el general era el de la muerte del soldado Neil Roberts, ca¨ªdo de un helic¨®ptero de transporte Chinook el pasado domingo, despu¨¦s de que el aparato fuera alcanzado por una granada. Los portavoces militares en Afganist¨¢n hab¨ªan explicado previamente que Roberts sobrevivi¨® a la ca¨ªda y que tres combatientes enemigos le hab¨ªan rematado. El cad¨¢ver, ya rescatado, presentaba un impacto de bala. 'No est¨¢ claro lo que ocurri¨®; pudo morir en el helic¨®ptero o en tierra, la verdad tardar¨¢ en saberse. Lo importante es que se organiz¨® una operaci¨®n de rescate y que su cuerpo y el de las dem¨¢s v¨ªctimas fueron sacados de all¨ª', afirm¨® el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld.

Ni Franks ni Rumsfeld quisieron hacer comentarios sobre los posibles fallos del rescate, en el que murieron otros seis soldados. Cuando llegaron al lugar, cayeron en una emboscada. Rumsfeld se incomod¨® cuando se le pregunt¨® si las im¨¢genes y los detalles del suceso se manten¨ªan ocultos porque pod¨ªan recordar a la opini¨®n p¨²blica los sucesos de Mogadiscio, recogidos en el libro y la pel¨ªcula Black Hawk derribado. 'Eso no tiene nada que ver', respondi¨®.

Franks asegur¨® que la Operaci¨®n Anaconda, como fue bautizado el asalto, supuestamente por sorpresa, a las cimas de Shahi-Kot, hab¨ªa sido 'bien planeada' Sin embargo, fuentes militares afganas y estadounidenses expresaron la sospecha de que la operaci¨®n se hab¨ªa organizado a partir de informaciones falsas, proporcionadas por se?ores de la guerra locales, y que las dos primeras jornadas hab¨ªan sido muy dif¨ªciles para los asaltantes, que hab¨ªan necesitado retirarse y reagruparse. Anaconda deb¨ªa durar 72 horas y ayer, cinco despu¨¦s del comienzo, no daba muestras de acabar. Al contrario. Franks anunci¨® que hab¨ªa solicitado m¨¢s helic¨®pteros Apache y 300 soldados adicionales, por lo que dispon¨ªa ya de unos 1.100 efectivos estadounidenses, 200 europeos y 800 afganos aliados.

De la violencia de la batalla no cabe duda. El general Hagenbeck inform¨® ayer de que los muertos por el lado talib¨¢n y de Al Qaeda ascend¨ªan a 350 'al menos'. Los muertos estadounidenses son ocho, y entre los afganos aliados hubo cuatro bajas mortales en los dos primeros d¨ªas. El fr¨ªo, la altitud de las cimas, la calidad de los resistentes (calificados de 'duros, capaces y decididos' por Franks) y el hecho de que sean extranjeros en su mayor¨ªa y compartan la trinchera con sus familias son elementos dram¨¢ticos adicionales.

El objetivo de los resistentes de Shahi-Kot est¨¢ claro. Si logran resistir lo suficiente e infligir un n¨²mero sustancial de bajas a los estadounidenses, demostrar¨¢n a otros grupos dispersos por Afganist¨¢n y Pakist¨¢n que pueden proseguir la guerra con acciones aisladas. Desde el principio, Al Qaeda ha tratado de prolongar el conflicto y hacerlo doloroso para la hiperpotencia. Shahi-Kot es, probablemente, el modelo que seguir¨¢ la guerra en las pr¨®ximas semanas.