Garc¨ªa de Cort¨¢zar publica una historia de Espa?a sin mitos

El historiador Fernando Garc¨ªa de Cort¨¢zar (Bilbao, 1942) ha metido en 348 p¨¢ginas toda la historia de Espa?a, desde los hallazgos de Atapuerca a la circulaci¨®n del euro. 'Es una historia sin mitos, donde Espa?a no aparece como problema, en la visi¨®n historiogr¨¢fica de los siglos XIX y XX. Est¨¢ escrita desde el optimismo hist¨®rico', afirm¨® ayer el autor en la presentaci¨®n de Historia de Espa?a. De Atapuerca al euro (Planeta), celebrada en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid.

Catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea, Garc¨ªa de Cort¨¢zar ha publicado estudios sobre el Pa¨ªs Vasco y la Iglesia, pero con Breve historia de Espa?a, con J. M. Gonz¨¢lez Vesga, alcanz¨® difusi¨®n de best seller. En esta nueva Historia de Espa?a, dice que se siente 'm¨¢s heterodoxo y libre' y que se trata de un libro 'm¨¢s de interpretaci¨®n y con voluntad literaria, sin utilizar el lenguaje del gueto universitario'.

'Esta historia rompe con los viejos mitos de la Espa?a como fracaso o como problema. Es una historia de la pasi¨®n por la vida, de una Espa?a de mil paisajes y mil colores. No es aquella Espa?a que en el XIX se empe?aba en afirmar su independencia respecto a cualquier pueblo. El nacionalismo espa?ol se bas¨® en el mito de la independencia frente a cualquier otro pueblo, y eso ya est¨¢ barrido. Esos mitos son muy operantes en otros nacionalismos, como el vasco', declar¨®. 'Todav¨ªa se mata por el derecho de autodeterminaci¨®n y el nacionalismo siempre ha encontrado una impunidad, sin tener la cr¨ªtica de los intelectuales'.

Garc¨ªa de Cort¨¢zar presenta como ideas-fuerza la historia de una construcci¨®n nacional de conquistas de libertades y derechos; el Estado-naci¨®n como una conquista de la modernidad, y la relaci¨®n del nacionalismo actual con el comunitarismo y el llamamiento a una conciencia liberal, que refleja la Constituci¨®n de 1978.

La narraci¨®n sigue, en diversos cap¨ªtulos, la historia en piedra, en acueducto, en un castillo, navegante, ilusionada, en libertad, desorientada y en positivo, con un ep¨ªlogo donde los poetas hacen su historia de Espa?a. El autor se refiri¨® ayer a Espa?a como 'una superpotencia cultural', con un idioma que nos une y el mayor patrimonio de la humanidad, donde las bellas artes florecen m¨¢s que las ciencias.

Si en la portada un cuadro de Regoyos reproduce la llegada del progreso (el tren), en la parte central se reproducen los iconos de Espa?a, desde la Dama de Elche a la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia.