Convalecientes y recuperados
Hasta hace poco tiempo, la ilusi¨®n de un pol¨ªtico en campa?a era arrebatar a un ni?o de los brazos de su madre, levantarlo en el aire para que se le viera y besarlo en el momento de la foto. Las cosas est¨¢n cambiando. Ahora resulta que se acerca un ni?o, le sueltas un cap¨®n y al d¨ªa siguiente suben las encuestas. Al menos en Francia y me temo que en muchos m¨¢s sitios. Aparentemente es un cambio trivial, de gestos, hasta es posible que fruto de la casualidad, pero cargado de contenido en el momento que llega a las audiencias y p¨²blicos. Cuando faltan los contenidos, los gestos dominan la escena pol¨ªtica.
La famosa imagen de un presidente cualquiera, sonriendo con la familia al completo, con la esposa, los hijos y el perro incluido, est¨¢ siendo sustituida en los telediarios por un presidente con escoltas, militares y en un contexto de guerra. Es evidente que la pol¨ªtica del beso al ni?o deja paso al candidato de bofetada al mozalbete.
Los gestos en¨¦rgicos, las frases duras y las acusaciones graves, que caracterizaron la batalla final del socialismo en el gobierno y en los inicios de su oposici¨®n, llegaron a cansar al ciudadano porque la respuesta emocional tambi¨¦n se agota y entonces s¨®lo deseas paz y recuperaci¨®n. Por eso fueron bien recibidas las maneras suaves, la pol¨ªtica tranquila y los nuevos modos de Zapatero y de su nueva generaci¨®n de socialistas. No hay animal m¨¢s agradecido que un convaleciente, dec¨ªan los cl¨¢sicos, y ese era el caso del socialismo en aquel momento. Pero hoy en d¨ªa nos recuperamos r¨¢pido, nadie soporta m¨¢s reposo que el imprescindible y ya se observan s¨ªntomas de irritaci¨®n de tanto besuquear al ni?o.
Los socialistas valencianos deciden hoy qui¨¦n ser¨¢ su pr¨®ximo candidato para las elecciones, Joan Ignasi Pla o Cipri¨¤ Ciscar, y hay mucho en todo ello de enfrentamiento entre los convalecientes de larga duraci¨®n y los viejos irritados que ya est¨¢n en franca recuperaci¨®n. La semana de campa?a fue parca en novedades aparentes, salvo las esperadas tensiones internas y bastantes art¨ªculos dando testimonio por alg¨²n candidato. Eso de dar testimonio tambi¨¦n es un poco antiguo, m¨¢s apropiado para las creencias religiosas que para una militancia madura que debe proporcionar argumentos de peso al margen de la fe en las personas.
Hasta ahora ninguno de los dos candidatos utiliz¨® grandes gestos para definir su postura, se limitaron a emplear met¨¢foras y s¨ªmbolos relacionados con el Titanic, nuevo pero hundido, o con la nostalgia como viejo recuerdo de un pasado que ya no es ¨²til para estos momentos. Puede que no sea suficiente para inclinar la balanza de ese 40% de indecisos, seg¨²n cuentan los sondeos apresurados, que tendr¨¢n que decidirse en el ¨²ltimo momento por el m¨ªnimo detalle que clarifique ambas posiciones. Es posible todo sea demasiado apresurado para una elecci¨®n que tendr¨¢ una gran importancia a largo plazo.
Mientras tanto, la estrategia de los socialistas valencianos ante las futuras elecciones auton¨®micas sigue esperando, como el ni?o de la campa?a francesa, para saber si continuar¨¢ la pol¨ªtica de caranto?as o recibir¨¢ un tratamiento m¨¢s en¨¦rgico y decidido. La soluci¨®n, hoy mismo.
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