Jos¨¦ Sacrist¨¢n protagoniza 'Fumata blanca', una floja pel¨ªcula de intrigas vaticanas dirigida por Garc¨ªa Borda
Hac¨ªa tiempo que a Jos¨¦ Sacrist¨¢n, uno de los mejores actores de su generaci¨®n, no se le ve¨ªa aparecer por las pantallas del cine espa?ol. 'Me han ofrecido mejores series de televisi¨®n y obras de teatro que pel¨ªculas apetecibles, no ten¨ªa que ver con mi voluntad', admiti¨® el actor ayer tras el estreno en el Festival de M¨¢laga del filme de Miquel Garc¨ªa Borda Fumata blanca, un thriller de intrigas vaticanas que no logra remontar el oficio de Sacrist¨¢n y de Cayetana Guill¨¦n Cuervo.
Tambi¨¦n se estren¨® la segunda pel¨ªcula de C¨¦sar Mart¨ªnez Herrada, Cuando todo est¨¦ en orden, un sencillo pero honesto melodrama social con rehabilitaci¨®n de toxic¨®mano de fondo.
La calidad de las pel¨ªculas de ayer dej¨® mucho que desear, pero lo m¨¢s extra?o es que tanto Fumata blanca como Cuando todo est¨¦ en orden presentaban maneras m¨¢s propias de un cine pasado que de las tendencias que presiden actualmente g¨¦neros como la intriga criminal y el drama familiar con tintes sociales. Pero ser¨ªa injusto colocar a ambos t¨ªtulos en el mismo caj¨®n.
Protagonizada por Jos¨¦ Sacrist¨¢n, por una eficaz y desenvuelta Cayetana Guill¨¦n Cuervo y por un Adri¨¤ Collado inc¨®modo tras el traje negro y el alzacuellos de su personaje, Fumata blanca cuenta una intriga a varias bandas que resulta casi siempre incre¨ªble y hasta disparatada. Se trata de una pel¨ªcula m¨¢s bien tosca de realizaci¨®n, deudora de un gui¨®n principiante y carente de un pulso narrativo seguro.
Cuando todo est¨¦ en orden supone un claro avance en la carrera de Mart¨ªnez Herrada, tras su decepcionante deb¨² con Manos de seda. Los desencuentros entre un padre obrero (Santiago Ramos) y un hijo ex drogadicto (Daniel Guzm¨¢n), las dificultades para reiniciar una relaci¨®n interrumpida sirven para que el director trace, con mano un tanto insegura y con una direcci¨®n de actores mejorable (salvo Cristina Plazas, espl¨¦ndida), pero con una historia que casi siempre resulta interesante, algunos retratos humanos desde una honestidad intelectual que merece respeto.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.