Rugova sale triunfante del duro interrogatorio de Milosevic en el Tribunal de La Haya
Slobodan Milosevic pierde fuelle casi tres meses despu¨¦s de la apertura del proceso en su contra, acusado de genocidio y de cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad por el Tribunal Penal Internacional para ex Yugoslavia (TPIY). Ibrahim Rugova, presidente de Kosovo, el m¨¢s importante de los testigos que hasta ahora han pasado por La Haya, le ha ganado la partida en las dos sesiones en que ha comparecido. H¨¢bil y escurridizo, Rugova no se desmoron¨®, se rio varias veces y rebati¨® con muchos 'no recuerdo' o 'no es verdad' el desordenado hilo argumental tejido por Milosevic.
'Fue usted y no otros el culpable de la destrucci¨®n de Kosovo', le espet¨® Rugova. Milosevic trat¨® de poner en situaci¨®n embarazosa a Rugova para que explicara su salida de Kosovo semanas despu¨¦s del inicio de los bombardeos de la OTAN, insinuando alg¨²n pacto deshonroso tras la entrevista que ambos tuvieron el 4 de mayo de 1999 en Belgrado. 'Fui yo quien le salv¨¦ la vida pidiendo al ministro de Exteriores italiano, Lamberto Dini, un avi¨®n para que se trasladara a Italia'. 'M¨ªreme a los ojos, diga por qu¨¦ me pidi¨® ayuda, porque ten¨ªa miedo a ser asesinado por el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo '. Rugova eludi¨® el reto visual, pero rechaz¨® varias veces tal argumento: 'No le implor¨¦ nada, me sent¨ª forzado y adem¨¢s estaba bajo arresto domiciliario. Aunque, s¨ª, ten¨ªa miedo, pero no del ELK. Nunca he tenido miedo del ELK. Le dije que quer¨ªa ir con mi familia a Macedonia. Kosovo estaba vac¨ªo, mis compa?eros estaban muertos, desaparecidos o se hab¨ªan marchado. Por eso me quer¨ªa ir. Usted decidi¨® que fuera a Roma'.
Milosevic se remont¨® a los ochenta para acusar a la mayor¨ªa albanesa de emprender una campa?a intimidatoria en la provincia aut¨®noma contra la minor¨ªa serbia. Recurri¨® a art¨ªculos escritos entonces por un enviado de The New York Times que conoci¨® bien a Rugova en los que se hablaba de supuestos casos de asesinatos, pillaje y violaciones de mujeres serbias. Rugova neg¨® todo y afirm¨® que los atropellos fueron cometidos por el Gobierno serbio cuando en 1989 decidi¨® suspender las prerrogativas constitucionales que Tito hab¨ªa otorgado a Kosovo. Esto cre¨® el clima de terror y desemboc¨® al final de los noventa en la limpieza ¨¦tnica y en la deportaci¨®n de cerca de 800.000 albanokosovares y en la muerte de 10.000 personas. 'Bas¨¢ndome en los hechos reales, no tengo duda de que ¨¦l es el responsable como presidente y como comandante en jefe de lo que sucedi¨®', contest¨® Rugova a una pregunta sobre la directa implicaci¨®n de Milosevic en la tragedia de Kosovo.
Tampoco le sali¨® bien al procesado el intento de demostrar que el ELK estimul¨® la huida de la poblaci¨®n albanokosovar en la primavera de 1999. El acusado exhibi¨® un panfleto previo al bombardeo de la OTAN, supuestamente firmado por Rugova, como 'presidente de Kosovo', en el que ¨¦ste y la guerrilla independentista confesaban no ser ya capaces de defender la seguridad de la ciudadan¨ªa y le alentaban a marcharse a Albania y Macedonia. Rugova no reconoci¨® ser el autor del texto y, tras examinarlo con m¨¢s detenimiento, descubri¨® faltas de ortograf¨ªa en su escritura albanesa. Esto hace sospechar que fue redactado por las propias fuerzas serbias.
Si hay algo ha quedado claro sobre la comparecencia en La Haya del fundador de la Liga Democr¨¢tica de Kosovo y presidente oficial de la provincia aut¨®noma desde el pasado marzo son sus aspiraciones: 'Siempre he querido y seguir¨¦ luchando por una rep¨²blica independiente de Kosovo'.
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