La Sala Beckett potencia su vertiente pedag¨®gica y estrena un montaje sobre un relato de Stefan Zweig

Buenas, esperanzadoras noticias en el sombr¨ªo panorama del teatro barcelon¨¦s. La Beckett, una de las salas alternativas m¨¢s vigorosas de la ciudad, ha ampliado sus instalaciones. Sus dependencias se hab¨ªan quedado peque?as para acoger toda la f¨¦rtil actividad generada por la sala, en sus or¨ªgenes sede del Teatro Fronterizo con Jose Sanchis Sinisterra al frente y dirigida actualmente por Toni Casares. Para remediarlo, sus responsables han alquilado un local en el mismo edificio, un piso por encima, que ha empezado a utilizarse como sala de ensayo y como aula para los talleres de escritura.

En los pr¨®ximos meses culminar¨¢ el ambicioso proyecto pedag¨®gico de la Beckett y el nuevo espacio se convertir¨¢ en sede de su escuela de dramaturgos.

La noticia de la ampliaci¨®n de la Sala Beckett para potenciar su vertiente pedag¨®gica coincide con otra positiva: la de que el peque?o Teatre Malic, que ha atravesado una crisis, no cerrar¨¢ ni se trasladar¨¢ de su espacio junto al Mercat del Born. El Malic tiene previsto modificar su estructura de gesti¨®n para ser capaz de hacer frente a los nuevos tiempos.

El director de la Beckett, Toni Casares, se?al¨® ayer que despu¨¦s del verano se presentar¨¢ oficialmente y con todo detalle el nuevo proyecto de la sala. El director se refiri¨® ¨²nicamente al riesgo que supone asumir nuevos gastos, toda una aventura si se tiene en cuenta la fr¨¢gil econom¨ªa que caracteriza a las alternativas. 'Ahora tenemos que generar mucha actividad para rentabilizar el local', reflexion¨®. Mientras esta nueva faceta se pone en marcha, la Beckett contin¨²a con su programaci¨®n de temporada, y lo hace con Els ulls de l'etern germ¨¤, un montaje a partir de un cuento del escritor austriaco Stefan Zweig (1881-1942) dirigido por Oriol Broggi cuyas funciones se inician hoy.

Broggi opina que el mayor gancho de esta obra, lo m¨¢s atractivo para el p¨²blico, estriba en el placer de escuchar una buena historia. Porque en realidad no es un montaje convencional, sino una propuesta a medio camino entre la lectura y la dramatizaci¨®n del cuento. Els ulls de l'etern germ¨¤ parte de la sencillez formal, con un escenario vac¨ªo que cobra vida gracias a la intervenci¨®n de un m¨²sico siempre presente (Marc Serra) y dos actores (Bruno Oro Pichot y ?scar Mu?oz). Durante su relato, los dos actores citan a numerosos personajes; en el caso de los m¨¢s importantes, los interpretan en algunas escenas.